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RETAbet Bilbao Basket se gana el derecho a soñar en Moscú (97-83)

ElDesmarque Bizkaia

La apretadísima victoria previa del Alba Berlín en el Siemens Arena de Vilnius (97-99), encima viendo como David Logan falló los dos últimos tiros libres que servían para empatar, dejaba al RETAbet Bilbao Basket con una única misión posible este miércoles en Miribilla, batir al Montakit Fuenlabrada por más de 11 puntos para recuperarle el basketaverage. Era eso o irse al 'cofre' seguro.

Una misión suicida a lo Tom Cruise, una final con lastre, que ha llevado a la escuadra de Carles Duran a sobrevivir brillantemente en la Eurocup tras vencer por (97-83) a los de Jota Cuspinera, con 16 puntos de Ivan Buva y 16+10 rebotes de Michael Eric como principales ejecutores. Primera parte cumplida, ahora queda la parte más difícil del doble reto, vencer al millonario Khimki en Moscú en la última jornada, aunque perdiendo podría quedar alguna remota posibilidad si el Fuenla cae ante Lietuvos en Madrid.
El haber hecho mal las cosas en casa en la primera vuelta, con dos derrotas, había llevado casi al sumidero las aspiraciones de los MIB. Esos agobios del mal estudiante provocaron los lógicos nervios vivídos desde el salto inicial. Costaba mucho tener precisión en los tiros, con lo que el marcador se movía de forma raquítica, 9-5 en 5 minutos, por ejemplo. El 1/5 en triples local hizo que se apostara por meter balones a Eric, recurso válido -tal vez con abuso de alleyhoops- hasta que salió Lapornik, que con una jugada de 4 puntos dio las primeras ventajas serias (16-11) a los vascos. 
Pero el Fuenla, con un buen Diagne, no cedía un ápice. Se mantenían firmes en la batalla, ellos tampoco estaban clasificados, y pese a perder claramente la pelea del rebote ganaban la del trato a la pelota, por lo que, anotando canastas sencillas, pudieron cerrar el primer cuarto con un 20-18 que dejaba todo como estaba. La igualdad era patente, pero el crono corría a su favor... tic, tac... varios robos de balón le permitieron incluso empatar a 26. La congoja rondaba el pabellón, pero aquí no se rinde nadie. Otro empuje de casta de los bilbaínos, fiables en el bloqueo directo, volvió a darles 8 de margen, acertando Tabu al dividir, alargar Rey sus ayudas y generar así fáciles mates para Micheal: 38-30, se abría un claro en la oscuridad.
El luminoso marcaba nueve arriba a dos minutos del descanso. El Bilbao Arena empezaba a soñar pero, aunque un triple de Hervelle dio el +12 buscado, la segunda falta del pivot nigeriano le mandó al banco con 12 puntos y 7 rebotes acumulados, demasiada ausencia, lo que aprovecharon los madrileños para volver a recortar guarismos. Así se llegaba al intermedio 45-37, que ni tan mal visto el pobre 5/17 en triples anotado. Eso sí, de ganas se andaría por +100 de valoración.
Rock or Bust
Una gran defensa al arribo del tercer cuarto fue el aviso de que los de Duran, en clara progresión anotadora, querían hacer sangre. Era el momento de romper el partido, de hacer R&R o de reventar como rezaba la gira de ACDC, ambas opciones estaban vigentes: tan pronto se volvía a mandar por 10 con un triple de Buva como el Montakit se ponía a 6 con una bandeja de Llorca. Un triple de Lapornik supuso ponerse 13 arriba, se tocaba el cielo, pero los de Cuspinera se movían con soltura al filo de la navaja y siempre encontraban el resquicio para no dejarse ir del todo. Que peleones.
También lo es Borja Mendía que subía el 71-57 al tanteador desde el tiro libre, el bilbaíno aporta intensidad como pocos, algo que agradeció Buva para cerrar el tercer acto con un triplazo desde la esquina que supuso el 74-59. ¡15 arriba! Tras hacer lo más difícil tocaba morir por el objetivo final, porque el Fuenla no se entregaba. Hizo un 0-5 de salida, de esos que te ponen las pilas, a Mumbrú, por ejemplo, que rompió el parcial con un lejano bombazo (ya eran 11/28).
Una antideportiva de Xavi Rey a Eric permitió estirar el chicle al 81-64, el toque de corneta venía al pelo. Miribilla rugía cuando Mendía se tomaba un merecido descanso con 5 minutos por delante, Mumbrú, hasta entonces apagado ponía el +21 tras explotar Jota Cuspinera que recibía una técnica. Ahí se esfumó su tren. 'Jo ta ke irabazi arte' atronaba el pabellón echando la vista ya a la última jornada en la que habrá que ganar en Moscú al Khimki.
No estará nada sencillo, pero al menos se llega vivos a la última jornada, lo que hace poco parecía una quimera.

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