El Movistar Estudiantes es consciente de que el partido de Vitoria, ante el Baskonia, puede ser clave en sus cada vez más escasas aspiraciones de volver a la capital alavesa en el mes de febrero para disputar la Copa del Rey.Con dos victorias de desventaja y seis partidos de margen, para el corte al final de la primera vuelta, los colegiales son conscientes de que sus opciones de ser equipo copero son cada vez menores y que sólo ganar en Vitoria relanzaría su candidatura.
Salva Maldonado, entrenador de Movistar Estudiantes, no lo tendrá fácil por las ausencias de Jordi Grimau y Dylan Page, aunque no busca excusas y promete competir con "los que estemos".
"Sorprender a un equipo de Euroliga en su cancha es muy difícil y no existe una receta mágica. Lo hizo hace unas semanas Tenerife, pero estos equipos se dejan uno o dos partidos al año y la sorpresa por tanto ya ha sido", comentó el técnico.
Maldonado constató que el Baskonia es "físicamente superior, por no hablar de la calidad, pero cada partido es diferente y nuestra mentalidad es hacer las cosas bien, tener regularidad, solventar los posibles malos momentos".
Los madrileños esperan poder aprovechar el cansancio de los baskonistas y la ausencia de Bargnani. Los alaveses ya se han dejado cuatro victorias en lo que llevamos de temporada y aspiran a ser quintos, aunque saben de la dificultad.
En temporada regular ambos equipos se han enfrentado en 26 partidos con 19 victorias alavesas y 7 estudiantiles, dos de ellas en Vitoria.
"Vamos a centrarnos en nuestro juego, nuestra defensa, nuestro ataque, guardar bien el balón, que no lo hicimos el otro día en algunos momentos, estar bien orientados... Preocuparnos de los nombres del rival no tiene mucho sentido. No lo hicimos con el Barcelona y el Madrid, tampoco lo vamos a hacer con el Baskonia", comentó Maldonado.