Tras un negativo comienzo liguero, con cuatro derrotas seguidas, el Herbalife Gran Canaria retoma posiciones y se acerca a su mejor versión de la mano de Luis Casimiro, un técnico que se estrena esta temporada en la isla y que considera que lo mejor del equipo "está aún por llegar".El entrenador del conjunto insular (Ciudad Real, 1960) afirma en una amplia entrevista a Efe que la fuerza de su equipo radica en la suma del grupo, aunque resalta el "impresionante nivel" que está exhibiendo el joven pívot internacional letón Anzejs Pasecniks.
-Pregunta- Recientemente calificó lo que iba de temporada como buena. Sin embargo, lo mejor debe estar por venir.
-Respuesta- Sí, hice un balance de fin de año y 2016 fue muy bueno al ganar la Supercopa y volver a meter al equipo en una dinámica positiva. La temporada está por ver todavía, pero sí creo que lo mejor está por llegar.
-P- ¿El Herbalife ha respondido a sus expectativas, personales y profesionales?
-R- Personales, siempre, porque sabía que venía a un club con muy buena estructura y criterio deportivo, y eso para mí era primordial. Profesionalmente, logramos el primer título de la historia de la entidad, tras hacer una pretemporada increíble y ganar la Supercopa, y retomamos el rumbo en la Liga y esperamos seguir en esa línea.
-P- ¿Qué le aporta Casimiro al Gran Canaria y viceversa?
-R- El equipo me aporta unas posibilidades tremendas, con jugadores de gran calidad y una plantilla amplia que hace años no tenía en mis manos, y un criterio deportivo que me da estabilidad. Espero aportar lo mejor de mi trabajo y, sobre todo, la ambición por seguir creciendo y ganando cosas.
-P- Ha asegurado que la fuerza de su conjunto es el grupo.
-R- Sí. Somos un equipo en el que se promedia el tiempo de juego. Los jugadores no pueden actuar muchos minutos seguidos, porque están dando el máximo. Sin individualidades que destaquen sobremanera en algo, todos ponen sus virtudes en beneficio del equipo.
-P- A nivel individual, ¿le ha sorprendido alguien?
-R- No tenía mucho conocimiento de Pasecniks. Trabaja bien y duro y, aunque necesita crecer en muchas cosas, se le ha dado confianza y está rindiendo a un nivel impresionante en los partidos.
-P- Al poco de llegar a la isla se ganó la Supercopa, contra rivales de mayor entidad.
-R- Por presupuesto tendríamos que haber quedado cuartos y fuimos campeones. Esto demuestra que el trabajo bien hecho tiene recompensa y que no siempre el dinero marca diferencias. Fue un debut increíble, aunque luego nos excedimos en celebraciones y eso no vino bien para la concentración del equipo.
-P- Tras la cuarta derrota consecutiva empezó a ser cuestionado.
-R- Tengo una ventaja y es que me centro en mi trabajo. Llevo muchos años y partidos y me dedico a trabajar con mi equipo cuando las cosas van bien y mal. El club me transmitió siempre confianza.
-P- ¿Dónde está el límite del Gran Canaria en Liga?
-R- Nuestra mentalidad y ambición nos pueden fijar nuestro techo. Hemos demostrado que podemos ganar a cualquiera y que podemos perder con cualquier rival. Lo importante para vencer es el aspecto mental, y hay días en los que aún sufrimos lagunas. Tenemos jugadores capaces técnicamente y el equipo está bien preparado tanto táctica como físicamente, pero hay que mantener la ambición diaria porque es la clave para saber hasta dónde podemos llegar.
-P- La clasificación para la Copa es para algunos lógica, debido al potencial del Herbalife, vigente subcampeón. ¿Lo ve así?
-R- Teníamos esa responsabilidad y la asumí en el primer momento. Somos un proyecto ganador y en crecimiento y estar en la Copa es fundamental porque se exige estar ahí. Hubiese sido una decepción no ir y no es un exitazo acudir. Si cada jugador es ambicioso y exigente consigo mismo y con el equipo podremos llegar alto.
-P- Muchos desean un Gran Canaria-Tenerife en el torneo del KO.
-R- (Se ríe con ganas). Me lo han dicho varios aficionados, que quieren que se dé ese partido y lo ganemos nosotros, claro. Como profesionales, sabemos que cualquier rival será muy difícil, y vamos a intentar ganar sea el equipo que sea.
-P- ¿Cree que podría lograr aquí el milagro que consiguió en Manresa, al ganar la Liga hace casi 20 años?
-R- Ya le hemos vuelto a 'robar' un título a los 'grandes', porque la Supercopa solo la ganaban Real Madrid y Barcelona. Lo del TDK Manresa fue un hito histórico difícil de repetir. Soñar es bueno, pero también debemos ser realistas.
-P- Aquel título liguero con el TDK lo logró con muchos jugadores catalanes. ¿Qué le pasa a la cantera canaria que no da esos frutos?
-R- Hoy en día, por la globalización, hay chicos de fuera de España que se forman en la isla. Acabo de llegar y tampoco conozco en profundidad el porqué no llegan canarios al primer equipo. He tenido a jugadores canarios que me han dado buen resultado, sobre todo el entrañable Rubén Quintana. Hoy lo que ocurre es que la competencia es mayor.
-P- El nombre de Luis Casimiro sonó con fuerza en 2008 para sustituir a Pepu Hernández en la selección.
-R- Mi fuerte nunca ha sido 'venderme', sino trabajar en silencio y que mis equipos hablasen por mí, para que los directivos valorasen mi trabajo. Estar al máximo nivel como entrenador en Gran Canaria es para mí una satisfacción y ser seleccionador nacional sería un halago. Aún tengo tiempo para ello.