Van Rossom vuelve a ser el guía

Van Rossom ha olvidado su via crucis particular desde que se lesionara en noviembre de 2015, lesión que le mantuvo casi un año alejado del parqué, y vuelve a ejercer de guía en el Valencia Basket. El belga ha ido de menos a más en este periodo de tiempo y en los últimos meses ha recuperado el juego que le llevó a ser uno de los bases más cotizados de Europa. Además, parece haberlo hecho en el momento más indicado.

Las lesiones han mermado la plantilla del equipo taronja y han golpeado sobre todo a la posición de base. Antoine Diot lleva varias semanas sin jugar y Guillem Vives tuvo que infiltrarse en el tobillo para, milagrosamente, ayudar al equipo ante el Khimki. El único "sano" en esta posición es "Sammy", que ha demostrado en los últimos meses que ha vuelto por sus fueros y está preparado para comandar al equipo en los últimos meses de competición.
Ante el conjunto ruso fue el máximo anotador del equipo con 17 puntos y volvió a dejar constancia de que no ha olvidado sus virtudes pese a las lesiones que ha sufrido en los últimos años. El jugador de 31 años vuelve a ser el jugador agresivo hacia canasta y ante el Khimki anotó ocho puntos en penetración, uno de sus sello más característicos. Además, convirtió tres triples de cuatro intentos que le llevaron, junto a los tres rebotes y otras tantas asistencias a un total de 13 de valoración.  En la Copa del Rey del pasado febrero Van Rossom tuvo una valoración media de 12,3 y en los últimos cuatro partidos de liga ha promediado 11,4.
El Valencia Basket afronta el último tramo de temporada con un calendario apretado por delante. El equipo que dirige Pedro Martínez sigue inmerso en la lucha por la primera plaza de la Liga Endesa y a su vez comenzará el martes en la Fonteta (20.30 horas) las semifinales de la 7DAYS Eurocup ante el Hapoel Tel Aviv. Las bajas son solo un contratiempo para un equipo que sigue demostrando sobre la cancha que está preparado para hacer historia.