Guillem Vives: "Las lágrimas fueron una mezcla de todo"

Sin duda, el hecho de que Guillem Vives saltara a la pista para jugar con Valencia Basket fue un aspecto motivador para el resto de los integrantes de la plantilla. El base catalán disputó el envite frente al Khimki de Moscú con el tobillo hinchado y dolorido. Una decisión que sorprendió a todos los presentes en la Fonteta. En una entrevista al programa 'Tiempo de Descuento' describió como fue la decisión de jugar el envite con un esguince en el tobillo. 

 
"Sabía que iba a jugar desde el miércoles por la mañana. El domingo pensaba que imposible. Pero el tobillo fue mejorando. Le dije a Pedro Martínez que quería jugar. El mismo día del partido empecé a correr y no me dolía tanto", afirmó Guillem Vives. 
"Sabía que iba a jugar desde el miércoles por la mañana"
El base del cuadro 'Taronja' termino llorando el partido, unos llantos fruto del dolor pero también de la emoción:  "Las lágrimas fueron una mezcla de todo. Pero un poco más de la emoción. Pedro me abrazo en el cambio final. Me dijeron que la lesión no podía ir a más". 
Vives reconoce que su acto fue importante para sus compañeros: "El aspecto mental, el que me viesen ahí, fue una motivación para el grupo. El lunes y el martes ya les dije que podría jugar. La gente podría imaginar que podía llegar".