Ellos estuvieron allí

Más de medio centenar de valientes se plantaron este martes en Valencia para animar a un Unicaja que plantó cara hasta el final, pero que no pudo con el Valencia Basket en el primer partido de la gran final de la Eurocup. 

El equipo taronja sólo cedió 55 entradas y volaron rápidamente en cuanto el club las puso a la venta. Había fiebre por la final, y los aficionados verdes no defraudaron. Despidieron al equipo en el hotel de concentración a gritos de "¡A por ellos!" y también algún cajista recibió al autobús en La Fonteta antes de que comenzara el primer asalto. 

Eran pocos, pero rugieron y se hicieron escuchar en el pabellón. Hubo buen ambiente en la Fuente de San Luis y también en Los Guindos, donde el Unicaja habilitó una pantalla gigante para presenciar el encuentro y donde se dieron cita varias decenas más de aficionados que vibraron con los suyos a distancia. Equipo y aficionados remaron para morir ahogados en la orilla, pero la final da una oportunidad para reengancharse en un Martín Carpena que estará a rebosar el viernes para intentar forzar el tercer partido.