El Real Madrid visita mañana Miribilla, el feudo de los hombres de negro, con la idea de ir buscando la regularidad en su juego y evitar bajones como el que tuvieron en el tercer cuarto ante el Morabanc Andorra que pueden costarle caro.En estos primeros partidos de la temporada es lógico que el juego del equipo no esté asentado y que se produzcan altibajos, pero Pablo Laso quiere evitar que los malos momentos sean tan profundos y prolongados.
Bilbao no es una plaza que se le de mal al Madrid que ha ganado en diez de las quince visitas que ha realizado a la capital vizcaína, pero tampoco se fía de que en los últimos diez enfrentamientos contra el Retabet Bilbao nueve se hayan saldado con victoria madridista.
Los hombres de negro se vieron desbordados por la velocidad e intensidad del Montakit Fuenlabrada en el primer partido de Liga y sólo cuando consiguieron maniatar a los madrileños en defensa y bajar el ritmo del partido pudieron nivelar el rendimiento.
El Madrid también funcionó mejor, en el debut liguero, cuando imprimió velocidad a sus acciones, tras dominar el rebote con claridad.
En este sentido, el equipo vizcaíno tuvo problemas bajo los aros a la hora de capturar balones y por ahí pueden llegar sus carencias porque los de Laso parecen superiores con el mexicano Gustavo Ayón, el serbio Ognjen Kuzmic y el esloveno-estadounidense Anthony Randolph.
El buen partido del francés Fabien Causeur es otro motivo de optimismo para los madridistas, así como la ayuda anotadora del base hispano-argentino Facundo Campazzo.
En el exterior, la ventaja tras la primera jornada también es para el Real Madrid que anotó el 48 por ciento de los triples que lanzó (10 de 21), mientras que el Bilbao se quedó en un 32 por ciento (7 de 22).
Pero todos estos precedentes se quedarán en nada cuando el balón sea lanzado por el árbitro principal, Daniel Hierrezuelo. Los hombres de negro lucharán por la victoria y el Real Madrid sabe que no lo tendrá fácil y que deberá ser más regular en su juego si quiere alcanzarla.