El Barcelona Lassa, en caída libre después de encadenar cuatro derrotas consecutivas, recibe este miércoles la visita del Unicaja, un rival directo en la Euroliga, al que los azulgranas confían en derrotar para mantener sus opciones en la lucha para clasificarse entre los ocho primeros de la máxima competición europea. La montaña rusa azulgrana parece haber entrado en una espiral negativa que se ha evidenciado en los últimos cuatro tropiezos ante Fenerbahce y Real Madrid, en la Euroliga, e Iberostar Tenerife y Herbalife Gran Canaria, en la Liga Endesa.
La crisis en la Euroliga, donde los azulgranas son duodécimos con el mismo balance que Unicaja (cuatro victorias en doce encuentros), se expandió también al Palau Blaugrana, donde el Barça suma dos derrotas seguidas ante Tenerife y Herbalife.
Tras la última decepción en su feudo contra el Gran Canaria, Sito Alonso se mostró muy crítico con la mentalidad de sus jugadores en los últimos encuentros, algo que buscará revertir a partir de mañana ante el Unicaja.
Además de trabajar en el aspecto anímico, el técnico azulgrana deberá incidir también en la intensidad defensiva de su equipo, una de sus señas de identidad en las victorias cosechadas tras el primer tramo de temporada.
Prueba de la fragilidad defensiva azulgrana lo demuestra que en las últimas cuatro derrotas ha encajado 87,7 puntos de media, lejos de los 78,6 por partido que recibe en Europa.
A ello se suman los problemas en la posición de base, donde Thomas Heurtel se erige como líder en la Liga Endesa, con una media de 14,3 puntos y 6,3 asistencias, unas cifras que en la Euroliga bajan, especialmente en la parcela ofensiva (9,5 puntos).
El relevo del base francés en el banquillo es Phil Pressey, cuyo proceso de adaptación al baloncesto europeo está siendo más lento de lo esperado (5 puntos de media y 2,5 asistencias).
También la irregularidad en el perímetro ha marcado las últimas derrotas azulgranas. El caso más paradigmático es el de Petteri Koponen, que en el último partido ante el Herbalife se quedó sin jugar. "Tiene la misma lesión que después del partido del Real Madrid, que hizo muy mal partido", respondió Alonso al ser preguntado por los motivos de su ausencia.
En la pintura, depende el Barcelona de la jerarquía de Kevin Seraphin, faro ofensivo en la Euroliga (12,8 puntos), al que debe acompañarle Ante Tomic, algo irregular en este primer tramo de la temporada.
A falta de dieciocho jornadas para que acabe la fase regular de la Euroliga, el Barcelona necesita hacerse fuerte en el Palau, donde ya suma tres derrotas, si quiere sellar el pase a los cuartos de final de la competición.
En los precedentes entre ambos equipos en un partido continental, el Barcelona tiene un balance positivo de cinco victorias en nueve encuentros.