El CSKA Moscú viaja hoy a Belgrado a por su octava Copa de Europa, para lo que tendrá que derrotar en la Final a Cuatro al Real Madrid, con dos de sus líderes, el francés Nando De Colo y el estadounidense Kyle Hines, entre algodones."Si no me equivoco, el Real Madrid tiene nueve copas y el CSKA siete. Pues ese es un aliciente más", comentó Dimitri Itoudis, técnico del equipo moscovita, en rueda de prensa.
La única baja del CSKA es el francés Leo Westermann, que se quedó en tierra y será operado de una hernia discal, según informó hoy el club en su página web.
El equipo moscovita acabó el domingo la liga regular VTB como líder del campeonato, aunque empatado a puntos con el UNICS de Kazán, y con sólo dos derrotas en su haber.
Aunque la noticia no fue su victoria en el terreno del Parma de Brest, sino el hecho de que De Colo y Hynes volvieron a las canchas después de varias semanas en el dique seco.
El francés, incluido en el quinteto ideal de la Euroliga, y Hines, nombrado mejor defensor del torneo, jugaron y demostraron que están para enfrentarse al equipo blanco en las semifinales de la Final a Cuatro.
Itoudis no forzó y ninguno de los dos pasó de los 20 minutos, aunque De Colo se mostró muy activo y, de hecho, marcó 17 puntos, mientras Hynes anotó seis y atrapó cuatro rebotes.
El escolta francés, que comentó a Efe que se compenetra muy bien con el español Sergio Rodríguez, es el máximo anotador del equipo con casi 17 puntos por partido y el segundo en asistencias con cuatro por encuentro.
Para ser su primer partido en mucho tiempo, ambos no parecieron estar faltos de rodaje, aunque la prensa y los especialistas rusos tienen sus dudas al respecto, especialmente teniendo en cuenta la fortaleza del equipo español bajo los aros.
Los cuartos de final entre el CSKA y el Khimki fueron especialmente duros para los moscovitas debido a la ausencia de ambos jugadores y, de no ser por los árbitros, la eliminatoria se hubiera ido a los cinco partidos.
La clave de la victoria del CSKA fue la magnífica actuación de Sergio Rodríguez, que ha mejorado muchísimo el tiro desde su llegada a Moscú, ya que como su anterior equipo, los Sixers, acabaron pronto la temporada, y pudo preparar el año como nunca.
Rodríguez, que ganó la Euroliga con el Real Madrid en 2015, es el tercer anotador del equipo con 14 puntos de media, a lo que hay que sumar 5 asistencias por partido.
Al igual que el técnico madridista, Pablo Laso, Itoudis ya sabe lo que es saborear las mieles del triunfo en una Final a Cuatro, ya que ganó con el CSKA en 2016, tras caer la temporada anterior ante el Fenerbahce de su maestro, Zeljko Obradovic.
Y es que Itoudis se unió en 1999 a Obradovic como técnico asistente en el Panathinaikos, donde ganaron cinco títulos de Euroliga (2000, 2002, 2007, 2009 y 2011).
La gran preocupación de los rusos no es tanto Doncic, que explotó definitivamente esta temporada, como el regreso de Llull, que fue clave contra el Panathinaikos.
Tanto Idoudis como De Colo comentaron a Efe que Llull es un jugador muy importante para el Real Madrid, una "inspiración" para sus compañeros y su "energía" puede ser un factor crucial en la Final a Cuatro.
Los rusos tienen un gran respeto por el equipo español, con el que mantienen una rivalidad histórica que data de hace medio siglo.
De hecho, de los equipos que monopolizaron la competición en los años 60 y 70 sólo mantienen el tipo rusos y españoles, ya que legendarios clubes como el Rigas, el Spartak checo o el Varese italiano han sido pasto de los vientos de la historia.
El CSKA derrotó al Real Madrid en la segunda final del equipo blanco, en 1963, moneda que los blancos le devolverían al equipo del Ejército soviético dos años después.
Muy dolorosa para los madridistas sería la derrota sufrida ante los rusos en 1969, ya que la final se disputó en Barcelona, donde la afición catalana, pese a las advertencias franquistas, apoyó al CSKA.
Desde 1973 el equipo soviético no volvería a ganar hasta 2006 con Ettore Messina en el banquillo, mientras el Real Madrid ganó en 1974, 1978 y 1980, además de en 1995 y 2015.
Aunque el CSKA ha levantado tres copas en este siglo por una del Real Madrid, además de ser casi fijo en las Final a Cuatro desde 2003.