El equipo que dirige Sergio Scariolo afronta con optimismo la tercera ventana de una primera fase en la que, además de a los eslovenos, se enfrentará a Bielorrusia el domingo en Málaga en busca de seguir apuntalando su clasificación mundialista, ya que todos los resultados de la primera fase computarán en la segunda.
España afronta ambos compromisos con la base de jugadores que disputaron con éxito las dos ventanas anteriores, con Juancho Hernangómez como único representante de la NBA y con ausencia de la mayoría de quienes juegan en equipos de Euroliga.
Al respecto, el seleccionador Sergio Scariolo aseguró durante la presentación de los dieciséis convocados que no siente "ninguna decepción" por las ausencias "y sí toda la ilusión y confianza del mundo en este grupo, que no es gratis porque ya han demostrado su valía".
A su juicio, todos ellos han demostrado sobradamente su "compromiso, calidad y talento" y han sido capaces de conjuntarse y formar un bloque cohesionado en poco tiempo, como ocurrió en las dos ventanas anteriores, en las que España ganó los cuatro partidos que disputó.
Preguntado por su próximo rival antes de viajar a Liubliana, dijo que "no hay que decir nada" sobre la calidad de los actuales campeones continentales "que además juegan en su cancha en un partido que tendrá una expectación tremenda".
El entrenador italiano afronta los dos próximos compromisos del equipo nacional "con mucha confianza, ilusión y ganas de hacerlo bien y de competir" para mantener la buena racha de la selección.
Eslovenia no podrá contar el jueves ni con su gran figura, Luka Doncic, al que su nuevo equipo -los Mavericks de Dallas- han pedido que descanse, ni con su hasta ahora compañero de equipo en el Real Madrid Anthony Randolph, que está indispuesto.
Tampoco jugará otro de los hombres que ganó el último Europeo, Goran Dragic, que ha decidido retirarse de la selección.
"Hemos entrenado y nos hemos preparado como si fuéramos a jugar sin Doncic y, lamentablemente, justo ha tenido que ser así", admitió este lunes el seleccionador esloveno, Rado Trifunovic, que prometió que su equipo "jugará a alto nivel y mostrará una excepcional combatividad" para intentar superar a España.