Primero fue Pau Gasol, y más recientemente ha sido Ricky Rubio el que se ha dejado caer por Bilbao. El base de Utah Jazz es un gran amigo de Raúl López. Tres grandes talentos del baloncesto que han coincidido en su gusto por "el botxo". A bordo de un barco pero también pisando las txoznak el de El Masnou pasa unos días de descanso antes de reincorporarse a la NBA.
Rubio ha tenido, por otra parte, varias citas benéficas este verano. Entre ellas la presentación de su propia fundación. El objetivo es el de sensibilizar, informar, prevenir y combatir sobre el cáncer de pulmón. Su madre falleció a causa de esta enfermedad y se ha lanzado con este proyecto solidario. El ex blaugrana incluso se planteó dejar la NBA cuando supo que su madre estaba enferma.
En estos días, aprovecha para cargar pilas y ha tenido bien acercarse a la Semana Grande Bilbaína.
Por otro lado, la temporada para el Bilbao Basket está a punto de comenzar. Álex Mumbrú ya se dejó caer por el acto de presentación de patrocinio de RETAbet. El próximo 27 de mayo se pondrá inicio al nuevo curso en LEB. Mientras tanto, llegan a cuentagotas las caras nuevas.
Ya hay varios partidos amistosos para testar a los hombres de negro. El 12 de septiembre ante el Palencia; el 16 en Azpeitia y el 18 en Cigales, Valladolid.