El Unicaja Málaga mostró en su primer encuentro de pretemporada ante Movistar Estudiantes en el Circuito Movistar de Guadalajara que Luis Casimiro aún tiene bastante trabajo para lograr ensamblar a su equipo y lograr ir encajando las piezas para que los mecanismos fluyan y vayan ensamblándose.
Esa labor de acoplamiento va a encontrarse con un problema, las Ventanas FIBA, que proponen partidos internacionales en medio de la preparación de la temporada, un caso que ha gustado bastante poco a los equipos europeos, sobre todo los que participan en competición continental, que suelen ser de los más afectados.
Por la parte de Unicaja, el tener una plantilla tan competitiva a pesar de no disputar esta temporada la Euroliga va a provocar que Luis Casimiro se quede con menos de la mitad de su plantilla disponible por un mínimo de diez días.
Alberto Díaz y Jaime Fernández están convocados por Sergio Scariolo para jugar con España en su visita a Ucrania (viernes 14 de septiembre) y en Madrid ante Letonia (lunes 17 de septiembre). Salin es un fijo con Finlandia, como ocurre con Milosavljevic con Serbia, Shermadini con Georgia o con el polaco Adam Waczynski. Además, Mathias Lessort ha sido convocado por Vicent Collet para defender la camiseta gala.
Diez días que perderá el técnico cajista a sus hombres, con los que podrá contar en el Torneo que lleva su nombre el próximo día 7 de septiembre para verlos partir un día después y no volver hasta el 18, por lo que no estarán a sus órdenes en el Trofeo Costa del Sol donde se verá las caras ante Olympiakos (13 de septiembre) y Real Madrid (15 de septiembre).
Los internacionales volverán a Málaga diez días antes del arranque de la competición, donde Unicaja recibirá en el Martín Carpena al Valencia Basket. Poco tiempo para mucho trabajo, gran tarea la que le espera a Luis Casimiro para comenzar la temporada con buenas sensaciones.