No ha comenzado bien la experiencia europea esta temporada del Unicaja Baloncesto. Un retraso en la salida del avión desde Málaga ha propiciado la pérdida del enlace en Copenhague con la nave que debía depositar a la expedición cajista en Vilnius para debutar mañana en la Eurocup (2018/19).
Así las cosas, el Unicaja debe pernoctar en Estocolmo y salir desde la capital de Suecia a las 8:20 horas rumbo a Lituania. Sin duda, no es la mejor manera de preparar un partido tener pocas horas de sueño y muchas de avión. Pero toca apretar los dientes.
No es la primera vez que le ocurre esto al Unicaja, no es extraño cuando se utilizan vuelos convencionales y se prescinde del costoso chárter. La expedición se lo toma con filosofía, cenó en el aeropuerto de Copenhague para llegar a Estocolmo e irse a la cama directamente.
Todo en una semana en la que el Unicaja tendrá que completar muchos kilómetros en el avión o en el tren, con tres viajes intersemanales.