Un mes se cumple desde que el Unicaja no afronta un partido cuesta arriba. Desde la derrota en el Wizink Center había enlazado una serie de victorias estimulantes que se cortó en Burgos. Ambos equipos y el Rytas Vilnius son los únicos que consiguieron que los de Casimiro hincaran la rodilla en el presente curso. Precisamente los lituanos visitan este miércoles (20:45 horas, Teledeporte) el Carpena para iniciar la segunda vuelta de la fase de grupos.
Tras el tropiezo en tierras bálticas, el club de Los Guindos apretó el acelerador en la Eurocup. Cuatro triunfos que le permiten competir por el liderato con el Unics Kazán y poder dejar prácticamente sellado, haría falta una derrota del Mornar Bar, al siguiente escalón del torneo continental. El Rytas, en un equipo sin muchas estridencias, llega en buena dinámica. De hecho, si rasca en el Carpena igualará a los malagueños. Adomaitis le está sacando el jugo a una plantilla corta. El choque contaba con el refuerzo de Manny Harris, con pasado NBA y que jugó ante los cajistas con el Olympiacos en el pasado Costa del Sol, pero ya rescindió el contrato.
El Unicaja tiene la duda de Brian Roberts, que está entre algodones por una contusión costal. El base evoluciona bien de su dolencia y completó el último entrenamiento, aunque sin mucho contacto. Casimiro confirmó que se vestirá y se irá viendo si con el paso de los horas estará en un estado óptimo para afrontar un partido de alta exigencia física. De guardia está el joven Pablo Sánchez, que aguarda su oportunidad para estrenarse en la Eurocup tras los problemas de su compañero, que se une a la lesión de Alberto Díaz. El jiennense volvió a los entrenamientos con el primer equipo y el entrenador está satisfecho con la evolución del base del EBA de Germán Gabriel.