Jaume Ponsarnau, entrenador del Valencia Basket, admitió que las matemáticas y el calendario les dan cierta confianza en poder estar en la Copa del Rey, pero admitió que esa situación puede llegar a confundirles y pidió a su equipo afrontar al máximo el encuentro del domingo ante el Herbalife Gran Canaria.
"Las matemáticas dan cierto margen pero yo tuve un descenso porque el Manresa ganó en la pista del Real Madrid, por lo que no vamos a dar los cálculos por hechos", dijo.
"Tenemos que hacer lo que nos toca y dar nuestro cien por cien porque todas esas estadísticas te llenan de niebla y te pueden confundir", explicó en una rueda de prensa.
Respecto al conjunto canario dijo que "es un rival con un potencial enorme que, debido a su participación en la Euroliga, tiene dificultades para mantener el nivel de energía en todas las competiciones y durante todos los partidos".
"Su potencial se basa en el físico, en la capacidad de creación, en el tiro de jugadores como Erickson, en el 'pick and roll' de sus 'cinco' y en la polivalencia de sus 'cuatro', como Eulis Baéz", añadió el técnico, quien dijo que se preparan "para jugar contra el mejor Gran Canaria posible".
El entrenador admitió que "uno de los dolores de cabeza" que tienen actualmente y un "reto" para su cuerpo técnico es el de la incorporación de los jugadores que salen de lesiones o que no están en un buen momento a la rotación.
"Queremos conseguirlo. Vamos a tomar ciertos riesgos hasta el punto que creamos que podemos hacerlo. Vamos a buscar un equilibrio que permita entrar jugadores sin que el equipo pierda la capacidad competitiva", explicó.