Antológico. No tiene otro sobrenombre lo que se vivió en el Carpena, tras conseguir el Unicaja, de la mano de su grada, de la 'Marea Verde', remontarle al Real Madrid una desventaja de 16 puntos que los blancos tenían al descanso tras un primer tiempo nefasto de los malagueños. Pero en la segunda parte, el empuje de la grada hizo que los jugadores cajistas se conectaran, sobre todo Jaime Fernández, para darle la vuelta al marcador y forzar la prórroga, en la que un triple del propio Jaime le dio la victoria al conjunto verde.
El Real Madrid saltó a la cancha malagueña conociendo la derrota del Barcelona en su visita al Tenerife y sabía que disponía de una oportunidad de recortar distancias con el líder blaugrana. Y salió decidido a conseguirlo. Aún no habían logrado los dos equipos romper a sudar y los blancos ya dominaban por diez puntos de diferencia (7-17).
Casimiro debía parar el encuentro y el tiempo muerto no le vino mal al Unicaja. De la mano de un Jaime Fernández que parece ir saliendo del bache de juego, logró un parcial de 7-0 a su favor que culminaba con un mate espectacular de Shermadini.
Pero entonces llegó otro momento de inflexión. Una falta muy protestada señalada al equipo malagueño acababa con técnica para el entrenador cajista. Quedaban dos minutos para el final del primer cuarto, y en los cinco minutos siguientes, el Unicaja se desenchufó, encajando un parcial de 2-16, con Rudy Fernández y Randolph castigando para romper el encuentro (21-38).
No era capaz de contener el equipo malagueño el ataque blanco, y los puntos caían con constancia al saco visitante. Hasta 57 puntos lograron en el primer tiempo, una renta muy alta, con un porcentaje de acierto en tiros de campo del 64%, anotando nueve triples de los dieciséis intentados. Con todo ello, suficiente era llegar al descanso con un hilo de vida (41-57).
En vestuarios, el cambio táctico que ofreció Casimiro para cambiar el rumbo del partido fue colocar a Milosavljevic a defender a Campazzo, que había sido el dueño del ritmo del encuentro en el primer tiempo. Este cambio desconcertó al Madrid, que bajó su ritmo anotador. Y con cinco puntos de Jaime Fernández de forma consecutiva, el Unicaja se metía en el partido (55-63).
El Carpena bullía, y el ambiente favorable hacía crecerse a los jugadores locales, llegando a colocarse a dos puntos de distancia (63-65). Entonces, apareció Rudy Fernández de nuevo, para con cuatro puntos y un robo y asistencia a Campazzo enfriar los ánimos de la grada. Seguía apretando el Unicaja, pero tres tiros libres muy discutidos concedidos por los colegiados a Rudy permitieron a los visitantes entrar al último cuarto con siete puntos de ventaja (69-76).
El 2+1 de Prepelic con el que se abría el parcial definitivo pudo presagiar escapada blanca, pero la inercia positiva del Unicaja le hacía seguir creyendo. Y la remontada se completó con auténtico ‘Showtime’. Asistencia de Milosavljevic entre las piernas para el mate de Shermadini y asistencia de Jaime para el mate del serbio (89-88). Quedaban 2:47 de infarto.
A cada canasta del Madrid el Unicaja daba respuesta, y se llegaba a los 23 últimos segundos con los locales con un punto de ventaja y posesión para los blancos. Causeur tuvo triple para ganar, pero erró su tiro y Dani Díez cogió el rebote que podía sellar la victoria.
El madrileño iba a la línea de tiros libres cuando quedaban sólo 1,2 segundos en el electrónico. Erraba el primero para posteriormente, falto de maldad, meter el segundo. Porque al anotar daba la opción a Laso de pedir tiempo muerto y sacar en campo contrario, lo que aprovecharon para que Ayón lograse anotar y forzar la prórroga (95-95).
El nivel de excitación era tan alto durante la prórroga que los jugadores no eran capaces de mantener el pulso necesario para anotar. El Unicaja fallaba canastas fáciles bajo el aro al tiempo que el Madrid erraba triples abiertos que podían ponerle la puntilla al choque. Todo lo que se anotaba era desde la personal, teniendo más oportunidades el cuadro blanco, lo que le hizo entrar al último minuto con ventaja (98-102).
Shermadini con un nuevo mate ponía el 100-102 a falta de 29 segundos. Campazzo retenía la bola el máximo tiempo posible y lanzaba al filo de la posesión, pero erraba el triple. En el rebote la bola salía de banda y los colegiados, tras consultar el 'instant replay', le dieron la bola al Unicaja a 3,8 segundos del final. Y entonces, Jaime Fernández puso la puntilla y desató la locura.
Ficha técnica:
Unicaja Málaga 103 (19+22+28+26+8): Roberts (14), Fernández (27), Waczynski (0), Wiltjer (7), Shermadini (18) – quinteto inicial – Milosavljevic (9), Salin (8), Díez (10), Boatright (3), Stilma (-), Lessort (7) y Okouo (-).
Real Madrid 102 (27+30+19+19+7): Campazzo (17), Carroll (5), Taylor (7), Reyes (4), Tavares (5) – quinteto inicial – Prepelic (5), Rudy (25), Ayón (7), Randolph (11), Causeur (7), Yusta (-), Thompkins (9).
Árbitros: Jiménez, Manuel y Baena. Eliminaron a Milosavljevic (min. 39). Técnica a Casimiro (min. 8) y a Laso (min. 36).
Incidencias: Encuentro perteneciente a la jornada decimonovena de la Liga Endesa disputado en el Pabellón José María Martín Carpena ante 10.208 espectadores.