La reacción del Kirolbet Baskonia, que ha sabido rehacerse tras las lesiones del base uruguayo Jayson Granger y el pívot georgiano Tornike Shengelia, se mide con la ilusión del Divina Seguros Joventut, la sorpresa de esta Copa, armado con una plantilla joven liderada por el base argentino Nico Laprovittola.
Baskonistas y verdinegros se verán la cara en los cuartos de final en el duelo que abrirá mañana el segundo día de la Copa del Rey de Madrid (19.00 horas), previo al derbi madrileño entre los dos equipos locales: el Real Madrid y el Movistar Estudiantes.
Aunque no juegan en casa, los seguidores vitorianos serán la segunda afición más representada en las gradas del WiZink Center, con casi dos millares de seguidores y solo por detrás de los 3.500 del Real Madrid, por lo que el conjunto que dirige el serbio Velimir Perasovic se sentirá más arropado en su búsqueda del título.
Madrid trae buenas vibraciones al Baskonia, que ha ganado dos de las últimas tres Copas disputadas en la capital, en 2006 y 2009. De ese último año data su último título copero, logrado al ganar por 98-100 en la final al Unicaja. Justo el año anterior lo había perdido en casa ante su rival de mañana, un Joventut que logró entonces la última de sus ocho Copas, por seis de los vitorianos.
Pero mañana no contarán los historiales. Tampoco podrán contar para el Kirolbet Baskonia dos de sus líderes, el base uruguayo Jayson Granger y el pívot georgiano Tornike Shengelia, con sendas lesiones de larga duración. El alero argentino Patricio Garino ha sido inscrito, aunque llega como duda por problemas musculares.
Sin Shengelia ni Granger, el argentino Luca Vildoza y el pívot alemán Johannes Voigtmann han dado un paso adelante, el interior americano Jalen Jones ha aportado intensidad, y el base brasileño Marcelinho Huertas sigue siendo un valor seguro para el equipo de Perasovic, que ha pedido a sus jugadores que piensen partido a partido para no llevarse un disgusto.
Enfrente tendrán a la sorpresa de esta primera mitad de la Liga Endesa, un Divina Seguros Joventut que ha pasado de una durísima campaña al borde del descenso y de la quiebra, a consolidar un grupo joven y ambicioso que ha logrado por derecho propio su billete a la Copa del Rey, competición en la que son el tercer equipo más laureado, tras Real Madrid y Barcelona.
Los de Carles Durán tienen una estrella indiscutible: el base argentino Nico Laprovittola, que lidera los apartados de puntos (15,7 por encuentro) y asistencias (6,45) de la Liga Endesa, en un equipo del que es capitán general, en el que juega 30 minutos de media por encuentro.
Junto a él, el pívot montenegrino Marko Todorovic ha ofrecido unas tremendas prestaciones en el regreso a sus orígenes -se formó en la 'Penya' y luego pasó por Barcelona, Bilbao y el Khimki ruso-, aunque el tercer ingrediente principal del equipo, el alero israelí Shawn Dawson, no podrá jugar por una rotura del ligamento cruzado que dará al traste con el resto de su temporada. El congoleño Nobel Boungou-Colo podría ser su sustituto, pero no estará en la Copa.
En Madrid tampoco estará el pívot sueco Simon Birgander, por lesión, y el escolta americano Dakota Mathias es duda por unas molestias en el tobillo izquierdo; pero la 'Penya' se reforzó con el pívot argentino Marcos Delía y cuenta con jóvenes como Xabi López-Aróstegui, internacional con la selección española, o el base macedonio Nenad Dimitrijevic para dar la sorpresa.
En el único precedente de este encuentro en la presente temporada, disputado en el Palau Olímpic de Badalona, el Baskonia tuvo que sudar de lo lindo para imponerse al Joventut.
Un duelo decidido por un tiro libre del pívot francés Vincent Poirier (67-68) en el que la 'Penya' remontó un partido que perdía por 14 tantos a falta de cuatro minutos (53-64) y que igualó a 27 segundos del final. Los de Perasovic están avisados.