Luis Casimiro compareció en rueda de prensa este martes en la previa del encuentro adelantando de la jornada 30 de la Liga Endesa que su equipo disputa mañana ante el Movistar Estudiantes (12:30 horas, #Vamos). Tras sus palabras, costaba adivinar a quien no le conociese si era el entrenador del Unicaja o un encargado de hacer coaching al grupo. El manchego se vistió de psicólogo y habló más de los aspectos mentales que del juego para definir la situación de su equipo.
Casimiro reconoció que el hecho de llevar tantos encuentros fuera de casa sin ganar puede afectar moralmente, pero no cree que estas derrotas sean provocadas por un bloqueo mental o psicosis de su equipo lejos del Carpena: "Nos ha ido pasando prácticamente de todo, bien es cierto que en el 2019 no ganamos fuera de casa en ACB. En Eurocup, sí. Es la realidad. Un denominador común no lo hay, no creo. Si vas analizando fuera de casa todas tienen un componente diferente. Más que buscar un denominador común es hacer un buen proceso de mentalización, de preparación táctica para tener ese reto ante nosotros mirando el presente. Acabamos de ganar un partido y cuanto más sumemos en esa dinámica positiva nos vendrá bien".
Siguiendo por la ruta de la psicología, el técnico manchego lo antepuso a la forma física de los jugadores. "Siempre creo que por delante del aspecto físico va el aspecto mental, si estás en un estado mental perfecto vas a estar apto para la exigencia. En todos los equipos el aspecto mental es clave a la hora de competir al máximo nivel. El otro día decía que el trabajo es un equilibrio entre todos. No es más importante el aspecto mental que el físico, pero va por delante. Si no estás con esa activación mental es difícil que encuentres el aspecto físico. Lo trabajamos todo al mismo nivel", señaló.
Cuestionado sobre si su trabajo se está teniendo que basar más en la cabeza que en el juego, Casimiro no negó la situación: "Siempre hay de todo, todos los días he estado trabajando y tienes la parte de entrenador y el aspecto psicológico. Cuanto más necesite el equipo el apoyo mental porque las situaciones no son buenas van a tener más mi apoyo mental para que pueda jugar con todas las garantías. Es lo que tengo que tratar ahora. Los entrenadores vamos a contracorriente. Cuando hay euforia hay que restar. Cuando estén pasando las cosas los entrenadores lo hemos podido percibir, vamos por delante para cambiar esos aspectos de psicología".
Lo que sí quiso negar rotundamente el entrenador cajista es que sus jugadores no son fuertes en el aspecto psicológico. "No lo llamaría tanto debilidad mental porque fueron diferentes aspectos, el equipo también ganó fuera de casa. Ganó en canchas muy complicadas, no hablaría tanto de una generalidad, no hay un denominador común pues fueron diferentes cosas. Anteriormente sí lo hicimos en canchas complicadas. El equipo se pone en todas las situaciones es capaz de competir en cualquier sitio", argumentó Casimiro.
También tiene que trabajar Casimiro el aspecto mental con uno de sus jugadores referencia, Jaime Fernández. El madrileño, tras brillar en su vuelta ante el Joventut, no ha tenido buenos partidos ante Breogán, Valencia y Burgos, pero el entrenador pide paciencia con él: "Está bien, pero él tiene la responsabilidad de ayudar mucho al equipo, de hacer muchas cosas bien. En deporte se llama la activación ideal y si no la tienes bien en todos los lados pues no es bueno. Tiene mucho deseo de ayudar al equipo y a veces está más crispado en el sentido bueno y no tiene la tranquilidad de que cuando está con plena confianza rinde muy bien. Está volviendo a la normalidad, jugó tres o cuatro partidos, poco a poco vuelve a su ritmo de competición. Es difícil porque cuando estás tiempo fuera no es fácil volver como cuando te ibas. Quería ser así, pero tiene que tener su periodo de recuperación y la paciencia para ser el mismo que antes".
Le conoce bien pues fue quien le hizo dar el salto muy joven al primer equipo precisamente cuando el manchego estaba en el banquillo del próximo rival, el Estudiantes. "Era un chico que subió a la pretemporada, que había visto jugar en la temporada anterior con el equipo de EBA, tenía mucho talento y chispa. Lo que recuerdo fueron mis palabras con el gerente y director general que el chico ya no volvía al equipo EBA, que se quedaba con nosotros para jugar la ACB y la Eurocup. Fue uno más y venía sólo para la pretemporada. Cuando lo vi tuve claro que no se podía ir del primer equipo", relató el manchego.
El rival de mañana no podrá contar con Gentile ni, muy probablemente, con una de las sensaciones de la temporada, Darío Brizuela. Pero Casimiro no quiere confianza ante estas bajas tan importantes para el Estudiantes: "Habrá otro que asuma sus galones. Clavell que no jugaba mucho pues asumió mucho protagonismo, fue un grandísimo anotador. Si no estará Gentile o Brizuela aparecerán jugadores que pueden hacer su trabajo. No podemos caer en la tentación de pensar que será más sencillo. No podemos tener esa debilidad porque no va a ser un factor que nos ayude a ganar a nosotros".