Sergio Rodríguez, tras ganar la Euroliga este domingo frente al Anadolu Efes en Vitoria, no quiso adelantar sus intenciones de cara al futuro, pero sí confesó que "todo el mundo sabe que mis sensaciones están con el Real Madrid.
"Ya se verá. Ahora es momento de disfrutarlo y para asimilar este año. Con este formato de Euroliga no paras y llega un momento a decir no puedo más. Ahora hay que terminar la liga rusa y verlo, pero todo el mundo sabe que mis sensaciones están con el Real Madrid", dijo tras el partido el primer jugador español que gana dos Euroligas con dos equipos distintos y con uno extranjero.
"Tengo mucha suerte de estar en los equipos que he estado porque me han dado la posibilidad de competir y ganar porque es muy difícil ganar una Euroliga", se felicitó el Chacho.
En cuanto a su estancia en Rusia y en un CSKA que "es una pasada", desveló que ha pasado "dos años muy buenos, aunque también difíciles por las circunstancias, pero cuando todo sale y terminas ganando está muy bien".
"Llevo un año muy complicado, el clima no es fácil en Moscú, he tenido altos y bajos y nos ha costado recuperar. Ahora tengo que hacer balance de todo con la familia", apuntó, acordándose también de la Euroliga ganada con el Madrid en 2015 en la capital de España.
"La de 2015 fue muy especial por haber perdido las dos anteriores y por lograrla en casa", recordó, apuntando también que para él "Vitoria es un sitio único".
En cuanto a la final, asumió que dijo "muchas veces se le ha remontado al CSKA" en otras finales a cuatro y que, como en el equipo ruso "siempre tienes presión", "este año igual había más" todavía.
También se felicitó por ganar un encuentro en el que "a (Shane) Larkin (29 puntos) era difícil frenarle".