El recién creado Sindicato de Entrenadores de Baloncesto (SINEB) fue presentado este jueves en Barcelona, una cita en la que su secretario general, el entrenador del Morabanc Andorra, Ibon Navarro, aseguró que la agrupación cuenta en menos de un mes de vida con 190 afiliados.
Navarro, acompañado en el comité ejecutivo por Salva Maldonado, Lluís Riera, Carles Marco y Miguel Ángel Ortega, explicó que, dentro de esos 190 afiliados, hay 11 entrenadores de la ACB, el 90% de los ayudantes de la Liga Endesa, el 80% de los técnicos de la LEB y el 50% de los de la Liga Femenina.
Al acto de presentación de SINEB acudieron entrenadores de la talla de Joan Plaza, Jaume Ponsarnau, Luis Casimiro o Joan Peñarroya, entre otros.
Reconocer y dignificar el trabajo de los técnicos asistentes, que "hasta ahora son invisibles", de los técnicos de la LEB y de la Liga Femenina es una prioridad para el sindicato, según expuso el preparador del Morabanc Andorra.
"Hay mucho más baloncesto que la ACB en España. Hay muchos más puestos de trabajo fuera de la ACB que dentro, y tenemos que defenderlos", sostuvo el secretario general, quien también explicó que desde SINEB quieren ayudar a los técnicos españoles que ejercen fuera del país.
Navarro relató que este nuevo sindicato surge por la disconformidad de un grupo de preparadores tanto con la Asociación de Entrenadores Españoles (AEE) como con el Comité Profesional, una agrupación nacida de la propia AEE para negociar con la ACB y que no incluye a los entrenadores ayudantes.
El presidente de ambos organismos es el mismo, Juan María Gavaldá, lo que según Ibon Navarro "constituye un conflicto de intereses evidente". Gavaldá, explicó el secretario general del SINEB, "firmó el convenio colectivo con la ACB hace tres años a espaldas de los entrenadores".
Con vistas a la negociación del próximo convenio colectivo (el actual expira en 2020), Navarro reveló que la ACB reconoce al SINEB como interlocutor, aunque aseguró que no se conforma con eso.
"A nosotros nos gustaría ir de la mano del sindicato de jugadores y de todos los sindicatos, y de las asociaciones de entrenadores. No somos el enemigo. No somos un ente aparte, estamos dentro de todo esto. Lo ideal es que fuéramos todos en la misma línea", concretó.
Salva Maldonado, también presente en la conferencia de prensa, expuso la necesidad de profesionalizar tanto la liga LEB como el baloncesto femenino y reveló que es "habitual que seis o siete clubes ACB lleguen a final de temporada sin estar al día de los pagos".
"Decir que la LEB es amateur, con contratos de trabajo, seguridad social todo el mundo... Y qué decir del femenino. Hay contratos, ganan un dinero, pero no son profesionales. Vamos a luchar, es una lucha un poco quijotesca, si quieres, pero vamos a luchar", aseveró.