El emocionante regreso del excajista Kuzmic tras superar un coma

Ognjen Kuzmic obró el milagro. El que fuera canterano y jugador del Unicaja regresó a una pista de baloncesto tras recuperarse de un grave accidente de tráfico que sufrió el pasado 14 de julio cuando regresaba de una boda en Bosnia. El coche en el que viajaba el pívot, el cual no conducía él, dio varias vueltas de campana y Kuzmic fue trasladado rápidamente a un hospital de Belgrado en el que se le diagnosticaron "graves lesiones en la cabeza y el pecho". Dada la importancia de las dolencias, los galenos decidieron inducirle un coma.

Pues bien, poco más de tres meses después, Kuzmic cerró definitivamente la carpeta de los malos recuerdos este jueves, cuando volvió a jugar con el Estrella Roja. Sólo fueron tres minutos y 24 segundos, pero a buen seguro que no se le olvidarán jamás. En el ecuador del segundo cuarto del duelo ante el Barcelona, la majestuosa Sala Pionir se vino abajo para recibir a Kuzmic. Vítores y aplausos a los que se sumó el mundo del baloncesto en general.

Porque lo de Kuzmic es una victoria en toda regla, algo que va más allá de lo estrictamente deportivo. Si bien su salto a la pista fue emocionante y con un aplauso atronador, lo fue quizá más su única canasta del choque. Recibió un balón en su zona natural y anotó debajo del aro. La primera de las muchas que quedan por venir, aunque por delante aún resta un camino de lucha para recuperar la masa muscular y el físico que ha perdido en este tiempo. De momento, saboreó los algo más de tres minutos ante el Barça como el mejor de los bocados.