La imagen del banquillo de los lesionados del Unicaja frente al Real Madrid decía más que mil palabras. Basta una comparación para ser consciente del calado. Luis Casimiro, a unos metros a la derecha, sólo tenía un jugador más disponible. La situación no es sencilla y por ello el equipo malagueño había solicitado a la Eurocup el aplazamiento del partido de este miércoles en Badalona. Pero, como confirmó el entrenador cajista, se jugará frente al Joventut en el cierre del Top 16. "Yo ya contaba con ello. A nadar contracorriente y a poner al mal tiempo buena cara. A trabajar al máximo los que estemos, es lo que nos toca vivir y a afrontarlo con la mayor de las ambiciones", dijo en rueda de prensa (ver vídeo inferior).
"Iremos con ocho", aseguraba el manchego, que tiene la duda de si apurar con Carlos Suárez o Melvin Ejim. El canadiense hizo parte del calentamiento con sus compañeros antes del encuentro. "Tendremos que forzar a alguno, de los que esté mejor. Podremos hacer la intención de que esté para el partido del que esté mejor. Tenemos que ir mirando al día. Algunos que no, otros que puede ser y otros que tendremos que forzar. Habrá que dejar pasar estos dos días. Alguno intentaremos forzar para que puedan estar", añadía el entrenador cajista.
El Unicaja dispondrá, según las palabras del técnico verde, ocho profesionales. Adams, Brizuela, Waczynski, Thompson, Elegar, Gerun y Rubén Guerrero son los siete fijos. El interrogante debe salir de Ejim o Suárez. Toupane es imposible y Alberto Díaz y Jaime Fernández también están inmersos en un proceso de recuperación que es más largo que el de sus otros dos compañeros. Es el panorama del club de Los Guindos en un partido sin importancia para la clasificación, pero sí para lo que viene después. Está en juego el factor pista, al menos, hasta la final del torneo.