El Unicaja logró el pase matemático para la siguiente ronda de dieciseisavos de la Liga de Campeones FIBA (BCL, por su siglas en inglés) gracias a otra victoria solvente en la pista del JDA Dijon (71-90) en una actuación coral, de ataque repartido entre varios jugadores como Kendrick Perry o Tyler Kalinoski, ambos con 14 puntos.
El conjunto de Borgoña comenzó en sexta marcha y el juego adquirió desde un principio un ritmo alto, pero un descontrol más alto todavía, donde imperaba más la anarquía, el robo y la pérdida y los errores constantes en la toma de decisiones.
Un primer cuarto que tuvo a diez guerrilleros con más duelo físico que inteligencia. Con la entrada de Tyler Kalinoski, que venía de ser clave en la última victoria liguera del Unicaja en La Fonteta, el equipo se animó a conectar canastas para empezar a poner tierra de por medio en los primeros minutos (13-22).
El Unicaja encontró el camino correcto: más calma en ataque y mantener su defensa para, con chispazos individuales de Kendrick Perry y el incombustible Will Thomas, ponerse en la máxima distancia con un +10 sobre un Dijon que iba al límite en cada jugada.
La inspiración de Robin Ducoté, que se puso en dobles cifras de anotación, no fue suficiente para mantener a flote al JDA Dijon, que vio como el Unicaja se puso en modo apisonadora para marchar al descanso ganando de 15 puntos y con la sensación de tener el partido ya más que amarrado (34-51).
Con una conexión tierra-aire entre Alberto Díaz y David Kravish, el cuadro malagueño se abrió paso en el tercer cuarto, donde pronto alcanzó la renta de 20 puntos de ventaja a través de un juego mucho más coral y de pase extra. Está demostrando este año que no es un equipo remontable, mucho menos cuando coge esa distancia en el marcador (40-57, minuto 24).
El alero Markis McDuffie apareció para reavivar algo el ataque de su equipo, un Dijon que había ganado cinco de sus últimos seis partidos y en ellos, el citado jugador había sido de los más destacados. Pero ambos equipos eran la noche y el día en un apartado que puede explicar muchas cosas: le guardia pretoriana del conjunto francés, centrada en los Hrovat, McDuffie, Ducoté, Holston y Alingue, se quedó corta frente al infinito fondo de armario de los cajistas, que aportan más desde el banquillo.
Para mal de los franceses, el Unicaja estuvo muy acertado desde la línea de tres, algo que no está siendo habitual en el cómputo global de lo jugado hasta el momento, aunque parezca extraño por la cantidad de tiradores que tiene a su disposición Ibon Navarro.
El 45% de acierto ayudó a la victoria, aunque volvió a ser mérito de la capacidad del Unicaja de abrir brecha desde bien pronto para ir manteniéndola, ya sea a través de los bajitos con talento como Kalinoski, Kendrick Perry o Darío Brizuela o por los siempre hambrientos en la pintura Kravish o Dylan Osetkowski.
71-JDA Dijon: (13+21+22+14) Holston (9), Brembly (0), McDuffie (17), Alingue (8), Hrovat (11) -quinteto inicial- Ducoté (15), Loum (4), Rousselle (7), Ware (2), Simon (4).
90-Unicaja: (22+29+17+23) Perry (14), Carter (9), Barreiro (0), Ejim (3), Lima (3) -quinteto inicial- Brizuela (11), Díaz (2), Osetkowski (10), Kalinoski (14), Will Thomas (6), Djedovic (7), Kravish (12).
Árbitros: Martin Horozov (Bulgaria), Martins Kozlovskis (Letonia), Kerem Baki (Turquía).
Incidencias: Partido de la jornada 4 de la BCL, disputado en Palacio de Deportes Jean-Michel Geoffroy.