Un enrachado Valencia Basket visita este domingo la pista del Unicaja Málaga tras haber enlazado entre la Liga Endesa y la Euroliga seis triunfos seguidos e inicia con la segunda vuelta de la fase regular una nueva etapa liguera, tras haber logrado clasificarse para la Copa del Rey, con el complicado objetivo de alcanzar la cuarta plaza.
El triunfo del pasado domingo ante el Casademont Zaragoza en la última jornada de la primera vuelta permitió al equipo de Álex Mumbrú lograr el último billete para el torneo de Badalona y cumplir así con el primer objetivo de la temporada.
Ahora, el conjunto valenciano afronta los diecisiete encuentros que restan con el reto de conseguir ascender de la octava a la cuarta posición y tener así ventaja de pista en el factor cancha en cuartos de final, dando por hecho que el camino en el que se encuentra le va a permitir clasificarse sin tanto sufrimiento para esas eliminatorias por el título.
No obstante, el equipo valenciano tiene nueve triunfos en su casillero, cuatro menos que el Cazoo Baskonia que es cuarto y sólo uno más que el UCAM Murcia, que es el duodécimo clasificado por lo que lo primero será conseguir asentar su sitio entre los ocho primeros.
Un triunfo en Málaga le permitiría recortar su desventaja respecto al Unicaja, que es quinto con doce victorias en su casillero. Mucho más complicado será que recupere el ‘basket average’ con el equipo que dirige Ibon Navarro tras haber caído en la Fonteta por 67-83, lo que le obliga a ganar por al menos diecisiete puntos para hacerlo.
El Valencia afronta este choque tras haberse clasificado para la Copa pero también después de haber logrado en la pista del ALBA Berlín su cuarta victoria seguida en la Euroliga, en la que prosigue su tenaz asedio a la zona de las eliminatorias.
Como ocurrió en ese choque, el Valencia deberá superar la baja de sus dos ‘cincos’ de referencia hasta ahora, Jasiel Rivero y Bojan Dubljevic. Para compensarlo, Kyle Alexander ha mejorado notablemente su rendimiento y Víctor Claver ha reaparecido lo que puede dar más opciones a Mumbrú para el puesto de ‘cuatro’.
Por fuera se mantendrán las bajas de Sam Van Rossom, Martin Hermannsson y Millán Jiménez pero Mumbrú ya cuenta desde la semana pasada con el base estadounidense Shannon Evans, al que fichó procedente del Betis pero al que aún le queda bastante para adaptarse al grupo. Además, Chris Jones parece haber mejorado de sus molestias en la rodilla derecha.