Valencia Basket arrasa a Movistar Estudiantes y ya está en la final de la Copa de la Reina (77-50)

Valencia Basket jugará su segunda final de Copa de la Reina tras derrotar al Movistar Estudiantes 77-50

Valencia Basket afrontaba su quinta semifinal de Copa consecutiva frente a Movistar Estudiantes, la revelación de la eliminatoria de cuartos con la intención de alcanzar su segunda final de la Copa de la Reina y lo consiguió. Tras la confirmación de la rotura de ligamento cruzado anterior de Raquel Carrera, las jugadoras taronja y cuerpo técnico arrimaron el hombro para luchar por un título que se hace un poco más difícil de obtener con la baja de tan importante pieza. Eso sí, de momento el primer paso ya lo han dado. Ahora se enfrentarán al ganador del enfrentantamiento entre el Casademont Zaragoza con el Perfumerías Avenida (15 h - Teledeporte) La final se disputará este domingo a las 12.30 horas. El combinado valenciano está a 40 minutos de su primer título de la Copa de la Reina

Valencia Basket no dio opciones a Estudiantes

Valencia Basket no dio opciones a Estudiantes y desde el principio demostró que quería clasificarse para la final por la vía rápida. El parcial inicial del choque 21-2 dejaba pocas dudas de las diferencias entre valencianas y madrileñas. Al final del primer cuarto, el 22-6 tampoco era nada halagüeño para las estudiantiles.

En la segunda entrega, apretaron los dientes pero las de Rubén Burgos seguían a la suya: suma y sigue y sin echar de menos a Raquel Carrera. Veinte puntos de diferencia al descanso (44-24) era más que clarificador de lo que había sucedido hasta el momento

El trabajo estaba hecho, pero queda un giro de tuerca más: la defensa

La tónica siguió exactamente igual tras el paso por vestuarios. El Valencia Basket había abierto el hueco y únicamente con mantenerlo le bastaba. El intercambio de canastas sin excesiva oposición beneficiaba a las taronja que, con mantener el nivel de anotación de su rival tendrían el partido y la final asegurada. Queralt Casas no perdonaba una contra y si las madrileñas anotaban de tres, respondía Nadia Fingall. De esta forma se llegaría al final de la tercera entrega con una diferencia sensiblemente superior a los anteriores cuartos: 57-34.

Valencia Basket entraba relajado en la última entrega pues, por fortuna para ellas y para sus aficionados, ha vivido situaciones de tensión similares en innumerables ocasiones. Por eso, aplicando un giro de tuerca más bastaría para ganar y así fue. El equipo de Rubén Burgos mejoró aún más en defensa haciendo muy incómodo cada ataque de Estudiantes y haciendo imposible una remontada en la que hacía muchos minutos nadie creía ya. Leticia Romero, una de las destacadas, machacaba a las madrileñas.

El técnico valenciano, en esta segunda entrega, viéndose superior, empezó a rotar con asiduidad pensando ya en la finalísima. Eso, no obstante, no le impidió a las valencianas bajar su renta en torno a los veinte puntos. Iagupova se gustaba cuando, a cinco minutos para el final, Estudiantes se ponía a 19 puntos. Rubén Burgos pidió tiempo muerto para pedir que nadie se relajara y que el equipo trabajara sobre la cancha para acabar plácidamente el choque como así fue. Iagupova y Torrens no perdonaban y, aunque Burgos llegó a cambiar a cuatro jugadores de golpe, el equipo lejos de flojear amplió su renta poco a poco.

Y con "Que bote la Fonteta" escuchándose en el Carolina Marín, Valencia Basket se clasificaba para la final con un marcador final de 77-50