Un paupérrimo Valencia Basket, que afrontó un partido vital sin la tensión ni el colmillo necesarios para después bloquearse por completo, sufrió este jueves una sonrojante derrota ante el ASVEL, con la que perdió casi todas sus opciones de clasificarse para el 'play-in' en la última jornada de esta Euroliga y que le costó una enorme y merecida bronca de la Fonteta.
Una victoria este viernes del Efes ante el Fenerbahce acabaría con sus opciones matemáticas antes de visitar al Partizan la semana que viene; pero casi más difícil que la carambola que necesitaría para acabar décimo parece ser que se pueda cerrar la herida abierta entre este proyecto y la grada, parte de la cual pidió ya dimisiones. Y el domingo recibe al Baskonia, en un duelo clave para llegar a los 'playoffs' de la Euroliga.
Liberado por estar eliminado desde hace meses, el ASVEL arrancó alegre. El escurridizo Paris Lee y la conexión entre Nando De Colo y Youssoupha Fall, los tiros abiertos del motivado ex 'taronja' y de Deshaun Thomas le permitieron sumar fácil ante un Valencia más presionado.
La defensa zonales del equipo de Pierric Poupet obligaron a pensar a los locales y eso les incomodó. Los errores no forzados empezaron a acumularse por encima de las canastas de Chris Jones y Álex Mumbrú hubo de echar mano de Stefan Jovic pero tampoco funcionó. En cualquier caso, el problema del Valencia estaba en su propio aro (17-27, m.10).
Necesitado de darle un giro al guión, el técnico del Valencia Basket recuperó a Jared Harper tras seis encuentros sin contar con él.
Necesitado de darle un giro al guión, el técnico local recuperó a Jared Harper tras seis encuentros sin contar con él. Su inspiración, anotó siete puntos en apenas 90 segundos, y el impacto por la lesión de Ndiaye, que abandonó el parquet en camilla y con collarín tras un fuerte golpe, debilitaron a un equipo francés que ya llegaba mermado por bajas y con solo diez jugadores (29-29, m.12).
Pero, necesitado de un refuerzo moral o con ganas de reivindicarse, Harper pecó de egoísta. Sus aciertos se convirtieron en errores y De Colo rellenó el colchón francés hasta devolverle buena parte de su renta. Sin intensidad física en ninguno de los dos aros, el Valencia no encontraba la manera y los pitos, clásicos ya en las presentaciones de Mumbrú, atronaron para todos en el descanso (38-52, m.20).
El Valencia retomó el choque con la obligación de ganar para llegar con opciones reales a la última jornada sobrevolando el tenso ambiente de la Fonteta. Y la tensión llegó a las muñecas locales para maniatarlas. La desventaja superó los veinte puntos con dos acciones del inacabable Fall y dos nuevos triples de De Colo y desde ahí se asomó a los treinta. Casi seis minutos estuvieron los locales sin anotar, un parcial de 0-17, un entierro en vida (38-69, m.26).
No había freno para la caída libre del Valencia. Desnortado, con tiros ridículamente cortos y siempre tarde en defensa, vio cómo el ASVEL casi le doblaba. La Fonteta empezaba a vaciarse y quienes aguantaban parecían hacerlo para poder silbar al acabar. Se empezó por pedir la dimisión de Luis Arbalejo, el director deportivo, para reclamar después la marcha de Mumbrú y, aunque no fueron gritos mayoritarios, el ambiente siguió encrespándose.
Los triples de Jones ayudaron a maquillar mínimamente la desventaja local pero nada cambió y al acabar el choque volvieron los pitos y los gritos de 'fuera, fuera'. Pocos hacían cuentas para saber cuántos milagros ´le hacen falta para la última jornada.
69.-. Valencia Basket (19+19+7+): Jones (18), Robertson (2), Ojeleye (6), Inglis (4), Davies (9) -cinco titular- Jovic (3), Harper (10), López-Arostegui (6), Anderson (6), Claver (3), Pradilla (2).
98.- ASVEL Villeurbane (27+25+27+): Lee (13), Jackson (12), Khaudi (7), Thomas (13), Fall (9) -cinco titular- Jackson (12), Lighty (2), Lauvergne (21), Ndiaye (-) y Yaacov (2).
Árbitros: Paternico (ITA), Pastusiak (POL) y Balak (ISR). Sin eliminados.
Incidencias: partido correspondiente a la trigésimo tercera jornada de la fase regular de la Euroliga disputado en la Fonteta ante 5.985 espectadores.