El entrenador de los Raptors de Toronto, el novato Nick Nurse, se mostró tranquilo después que su equipo perdió el segundo partido de las Finales de la NBA por 104-109 ante los Warriors de Golden State y dijo que ahora serían ellos los que tuviesen que reaccionar de la misma manera.
"Estamos en el mismo barco que ellos cuando llegaron a nuestro campo", explicó Nurse. "Ahora seremos nosotros los que tenemos que ganar un partido en el suyo".
Nurse está convencido que los Raptors, cuando el miércoles disputen el tercer partido de la serie al mejor de siete, saldrán con la mentalidad ganadora que tienen en cada encuentro y todo será posible.
"Es todo lo que debemos conseguir, un triunfo", reiteró Nurse. "Pero lo más importante es que estamos convencidos que lo podemos lograr".
Nurse recordó que lo pudieron hacer antes en campos muy difíciles como fueron el de los Sixers de Filadelfia (semifinales) y los Bucks de Milwauke (finales Conferencia Este).
En cuanto a la jugada decisiva en la que la defensa dejó sin marcar al veterano escolta Andre Iguodala, quien a falta de 5,9 segundos para el final anotó el triple decisivos, Nurse defendió las acciones de su defensa.
"No le estábamos faltando el respeto a nadie", comentó Nurse. " "Estuvimos vigilando mucho, le pusimos dos marcadores a Steph (Curry) y estuvo cerca de perder el balón ante Kawhi (Leonard), lo que demostró que la defensa era bastante buena ante la gran movilidad que tenían los jugadores de los Warriors".
Sin embargo, al final de toda la secuencia, el base Shaun Livingston le dio el pase perfecto a Iguodala, y solo sentenció.
"Lo encontraron e hizo el tiro, pero si lo hubiese fallado nos hubiera permitido tener la posibilidad de recuperar el balón y buscar la victoria", valoró Nurse. "Seguro que vamos a vivir con lo que sucedió, pero no le faltamos a nadie al respeto, montamos una trampa para tener la mejor oportunidad de ganar el partido".
Nurse admitió que no se dio como pensaba, pero que estaría listo para repetir lo que hicieron porque una jugada no le cambiaba la estrategia global que había tenido el equipo durante todo el partido.
El mismo sentir expresó el alero estrella de los Raptors, Kawhi Leonard, quien acabó como líder del equipo al aportar un doble-doble de 34 puntos y 14 rebotes, en los 39 minutos que estuvo en la pista del Scotiabank Arena de Toronto.
"Tuvimos hasta el final la oportunidad de haber ganado el partido, pero esta vez, los puntos decisivos los consiguieron ellos y ahí estuvo la diferencia final", comentó Leonard. "Creo que cometimos muchos errores, especialmente en el tercer periodo, cuando fallamos demasiados tiros a canasta".
Leonard reconoció que ganar a los Warriors en su campo no es la más fáciles de las misiones, pero tampoco es "imposible", por lo que el equipo llegará al tercer partido en una buena posición.
"Hemos competido bien en ambos encuentros y vamos con la serie empatada por lo que todo puede suceder en los próximos dos partidos", agregó Leonard.
Mientras que el ala-pívot camerunés Pascal Siakam, quien en el primer partido fue la estrella al establecer la mejor marca profesional en los playoffs con 32 puntos, en el segundo apenas logró 12 tantos.
"Creo que me fallé muchas penetraciones y tiros en el aire que normalmente anotó cuando estoy en el campo", valoró Siakam. "Ahí estuvo la clave y eso se dio porque simplemente no pude encontrar mi mejor ritmo en ataque, algo que puede ocurrir en cualquier partido".
Mientras que el base Kyle Lowry, quien tampoco pudo ser factor ganador al conseguir 13 puntos y dos asistencias, también reconoció que no habían jugado su mejor partido al cometer demasiados errores.
"Veremos el vídeo del partido y no tenemos ninguna duda que corregiremos los errores para volver a ser competitivos y sobre todo que nuestros jugadores claves recuperen el mismo protagonismo que tuvimos en el primero", comentó Lowry.
Uno de esos jugadores fue el pívot español Marc Gasol, que al igual que Siakam nunca pudo encontrar su mejor ritmo en el juego de ataque y acabó con seis puntos, comparados a los 20 que logró en el primero, que lo convirtieron en el factor ganador de los Raptors.