El partido entre Denver Nuggets y Minnesota Timberwolves estuvo lleno de polémicas. Jamal Murray perdió los papeles en el segundo cuarto. Desde el banquillo, el jugador decidió arrojar una compresa de calor durante una jugada viva en la banda. Los árbitros no se percataron del incidente, pero las cámaras del pabellón captaron el momento del acto.
La acción no fue a más porque Kentavious Cadlwell Pope recogió inmediatamente la bolsa térmica y la lanzó fuera del parqué. Este hecho podría haber causado alguna lesión a algún jugador que se encontraba en la pista.
Jamal Murray threw a heat pack on the court during play and faced no consequences for doing so #NBAPlayoffs pic.twitter.com/dXh8tszcL1
— Bad Sports Refs (@BadSportsRefs) May 7, 2024
Los Denver perdieron por 80-106 y fruto de la desesperación, el jugador de los Nuggets lanzó la bolsa térmica. Los árbitros no sancionaron a Murray, pero la acción puede obligar a la NBA a entrar ya que se trata de una jugada peligrosa.
En el momento, los colegiados no se percataron de la peligrosa acción de Murray. Concluido el partido, los árbitros confirmaron que no lo vieron y que por eso no sancionaron el incidente. Aunque remarcan que de haber revisado y comprobado que Jamal fue el autor del hecho, hubieran tomado medidas.
"Yo era el árbitro principal y no me di cuenta de que estaba en el suelo o de dónde venía hasta que Towns anotó. No sabíamos que venía del banco, si hubiéramos sabido que venía de allí y podríamos haberlo revisado. La penalización habría sido una falta técnica", comenta Marc Davis, árbitro principal del encuentro.
Jamal Murray throws a heat pack pic.twitter.com/JDADMojQgp
— Rob Perez (@WorldWideWob) May 7, 2024
No pasó nada, pero la realidad es que el jugador de los Nuggets puso en peligro a todos los jugadores de la pista. Pisar dicha bolsa y resbalar podría haber supuesto una grave lesión para cualquier compañero o rival. Por ello, el entrenador de Minnesota, Chris Finch, se enfadó por el gesto antideportivo del jugador.
"No vi la jugada, los árbitros tampoco, pero intentamos señalar que no habrá muchos aficionados con compresas de calor en el pabellón. Probablemente venía del banquillo, y lo vieron lógico", dijo Chris Finch. "Es un hecho inexcusable y peligroso, y aunque fue un error y descuido de los árbitros, esto no puede permitirse", continuó.