El Universidad Católica de Murcia logró de forma agónica, ante el Baloncesto Sevilla (80-76), su séptima victoria consecutiva en casa, cortando la racha de los andaluces, en un partido con mucha más tensión que buen juego y en el que los bases Facundo Campazzo y Carlos Cabezas, con 33 puntos y 22 de valoración entre ambos, acabaron siendo letales.
El encuentro mantuvo un guión constante desde el comienzo. El juego transcurrió muy trabado y con más fallos que aciertos y generalmente con el UCAM CB mandando en el marcador.
Tras un primer cuarto que concluyó con cinco puntos de renta para los de Fotis Katsikaris (18-13) y el argentino Campazzo dando muestras de su enorme talento, el segundo parcial transcurrió a base de tirones.
Los murcianos llegaron a ir ganando por 29-15 con un Thomas Kelati desatado en el triple al anotar sus tres intentos. Sin embargo, los de Luis Casimiro reaccionaron y, con un parcial de 0-9, llegaron más que vivos al descanso (34-29).
La igualdad se hizo patente tras el intermedio y, como había ocurrido minutos antes, cuando el UCAM CB parecía más entero (44-37) llegó la respuesta andaluza.
Tanto fue así que los sevillanos acabaron el cuarto por encima en el tanteador merced a dos tiros libres de Alfonso Sánchez que certificaban la remontada (48-49).
Estaba todo por decidir y el acierto más allá de la línea de 6,75 metros resultó clave. Cinco triples locales -Scott Wood, José Ángel Antelo, dos de Cabezas y Campazzo- mantenían a los granas al mando, pero por escaso margen (63-59).
El Baloncesto Sevilla, que llegaba a Murcia tras sus sonadas victorias ante el Laboral Kutxa Baskonia y el Herbalife Gran Canaria, no estaba dispuesto a dar su brazo a torcer y pese a que el 69-61 en el minuto 36 parecía casi insuperable, el amor propio de Scott Bamforth y Berni Rodríguez, dos ex jugadores del UCAM, llevó al partido casi a un cara o cruz (71-69) a menos de minuto y medio.
Las faltas y los consiguientes tiros libres se sucedieron en ambas zonas y Serhiy Lishchuk, tras capturar un rebote defensivo, fue el encargado de anotar los dos últimos para esta vez sí sentenciar el choque (80-76).
De este modo, tras dos horas de intensidad e incertidumbre en el Palacio, el cuadro grana, con 12 victorias y 13 derrotas, continúa firme en su objetivo por acceder a las eliminatorias por el título, mientras que el Baloncesto Sevilla, con un bagaje de 9-16, sigue a la misma distancia de esa meta que de la zona de descenso.
- Ficha del partido:
80 - Universidad Católica de Murcia Club Baloncesto (18+16+14+32): Campazzo (17), Wood (6), Rojas (-), Antelo (10) y Lishchuk (11) -cinco inicial-, Benite (3), Cabezas (16), Radovic (6), Faverani (2) y Kelati (9).
76 - Baloncesto Sevilla (13+16+20+27): Hakanson (15), Bamforth (11), Berni Rodríguez (9), Nachbar (11) y Balvin (12) -cinco inicial-, Alfonso Sánchez (6), Miljenovic (2), Oriola (4), Henton (3) y Jordan (3).
Árbitros: Miguel Ángel Pérez Pérez, Vicente Bultó Estébanez y Juan José Martínez Díez. Eliminaron por cinco faltas personales al local Radovic y al visitante Hakanson, a ambos en el minuto 39.
Incidencias: Partido correspondiente a la vigésimo quinta jornada de la Liga Endesa de baloncesto que se disputó en el Palacio de los Deportes de Murcia ante 5.623 espectadores. Antes del inicio del encuentro se guardó un minuto de silencio en memoria de las víctimas de los atentados perpetrados en Bruselas.