Valentía, técnica y equilibrio las claves para los descensos

Les-Dombes (Francia), 16 jul (EFE).- El Tour de Francia ofrece este domingo un final en descenso de 14 kilómetros desde la cima de Lacets du Grand Colombier hasta Culoz. Puede ser espectacular, y tal vez trascendente para la etapa y la general. En ciclismo no solo se puede sorprender subiendo. También bajando, una cuestión de valentía, técnica y equilibrio,
El español Samuel Sánchez (BMC), de 38 años, es uno de los mejores especialistas del pelotón a la hora de descender un puerto. Una habiliCarlos de Torres
Villars-Les-Dombes (Francia), 16 jul .- El Tour de Francia ofrece este domingo un final en descenso de 14 kilómetros desde la cima de Lacets du Grand Colombier hasta Culoz. Puede ser espectacular, y tal vez trascendente para la etapa y la general. En ciclismo no solo se puede sorprender subiendo. También bajando, una cuestión de valentía, técnica y equilibrio,
El español Samuel Sánchez (BMC), de 38 años, es uno de los mejores especialistas del pelotón a la hora de descender un puerto. Una habilidad que posee desde los 3 años, cuando ya montaba en moto, debido a que su padre tenía un taller. Y luego practicó motocross antes de subirse a la bici para ser profesional.
"Ante todo", dice "Samu", "en las bajadas hay que confiar en uno mismo y dejar el miedo en casa. Si vas con miedo te caes".
Dejando clara la premisa, Samuel cree que "la habilidad para el descenso en un don con el que se nace".
"La clave es saber leer las curvas y no tocar el freno más que lo justo, aparte de no tener miedo. Hay que lanzarse, saber trazar", explica.
En cuanto al aspecto técnico, el campeón olímpico en Pekín'08 se refiere a la habilidad para intercambiar los pesos del cuerpo y tratar de ayudarse con la inercia de la bici para entrar y salir rápido en las curvas.
"Por ejemplo, en una curva a la derecha hay que levantar el pie derecho y contrarrestar con el pie izquierdo, y antes de trazarla hay que frenar un poco. Si frenas en medio te puedes caer, rectificar es muy peligroso", advierte.
Cuando en el descenso hay pocas curvas y se baja más rápido, la cuestión es "echarle valor", y precisa que "el buen bajador conoce su límite, pero lo tiene muy alto; los que no lo conocen se sobrepasan y se caen"
"Ahora arriesgo lo justo. Con la experiencia la percepción es diferente y te la juegas menos para no caerte. Con 25 años decía +a por todas+, y ahora se piensa más".
Ante una etapa que se puede resolver en descenso, como la de este domingo con final en Culoz, Sánchez incide en cual puede ser la clave. "Hay que coronar arriba y lanzarse. El que baja bien gana tiempo o lo reduce. Hay que ser valiente, pero no loco", afirma.
Otro gran especialista en descensos en el italiano Vincenzo Nibali, uno de los 6 corredores de la historia con las tres grandes rondas en su palmarés. Otro intrépido desde niño, siempre en cabeza a la hora de lanzarse a tumba abierta en los descensos más peligrosos.
Para el "Tiburón la clave en las bajadas es el equilibrio, aspecto que se ha desarrollado desde su infancia con la bicicleta de montaña. "Sorteando obstáculos se adquieres un equilibrio que te aporta mucho en la carretera".
Nibali coincide con Samuel Sánchez en que antes de afrontar una curva hay que "saber leerla".
"Si es una curva redonda lo mejor es abrirse lo más posible y enseguida buscar la cuerda, después mantener el máximo de velocidad para salir bien.
El ciclista italiano destaca la importancia de controlar la posición de la cabeza. "Yo la inclino hacia el interior", dice.
Nibali tiene un truco muy común entre los corredores. "En carrera me fijo en los coches y motos que van delante, sirven de referencia".
"Si ves que la moto frena, te permite adivinar si la curva se cierra o se abre. Si entras demasiado deprisa en una curva que se vuelve a cerrar te vas hacia el exterior, te sales de la carretera".
Ante todo, y a la par de técnicas y habilidades, hay que ser valiente. "No hay que tener miedo". EFE.