El español Ángel Madrazo (Burgos-BH), líder de la Montaña en la Vuelta 2019, asumió, tras la llegada de este viernes al sprint en Gijón, que ahora le "vienen dos días muy duros" para mantener el maillot con puntos azules que lleva desde el segundo día de la carrera.
"Vienen dos días muy duros, pero seguiremos intentándolo mi equipo y yo, que queremos dejar huella", apuntó, casi hasta felicitándose de que se haya "metido más gente en la pelea", ya que le "da más mérito" a la clasificación por la que lucha.
De cara a los dos próximos días, con finales en el Puerto del Acebo (Primera) y el Alto de La Cubilla (Especial), apuntó que tiene "mucha motivación", entre otras razones, porque "esta tierra" asturiana le "gusta mucho".
En el tono alegre en el que se expresa el cántabro, dijo que se alegró cuando vio que hoy "se quedaba" su principal rival, el francés Geoffrey Bouchard (AG2R La Mondiale). "Ahí me dije: 'aquí me quedo con este'", recordó.