La Neom Titan Desert Arabia Saudí 2022 mezcla entre sus participantes a medallistas olímpicos y mundiales con mayoría de anónimos, de diferentes nacionalidades y edades. En la presente edición, a dos de sus titanes, los españoles Pablo Galán, de 17 años, y Antonio Rodríguez, de 69, "solamente" les separa medio siglo, pero les une la misma ilusión: disfrutar de la bici.
Pablo Galán (Sant Carles de la Rápita, Tarragona), cumple 18 años este viernes en Neom Bay, adonde llegó acompañado de su hermano, de 21, contra el deseo de sus padres, pero finalmente financiado por ellos como regalo de cumpleaños.
"Empecé a montar en bicicleta hace 3 años, tuve un accidente, me rompí la clavícula y me pusieron 12 clavos. Pertenezco al club BTD, la empresa de mi hermano que se dedica al desarrollo de un producto para la bicicleta que va a revolucionar el mercado", señaló el juvenil.
Antonio Rodríguez, de 69 años y dorsal 69, originario de Málaga, lleva 49 años viviendo en Girona. Es "Titan Platino" por haber participado en once Titan y haber superado 5.700 kms. Se apunta a las carreras del desierto porque se encuentra "bien, con ganas, con salud" y no quiere llevar vida "de viejo" como algunos de sus amigos.
Galán, el benjamín del campamento donde conviven los 220 participantes, llegó arrastrado por su hermano y solo quiere pasarlo bien y que su padres no tengan razones para llevarse un disgusto.
"Me apunté a la Titan porque mi hermano hizo la de Marruecos y me animó a venir a Arabia. La inscripción es el regalo por los 18 años que cumplo este viernes. A mis padres no les gustó que viniera a Arabia, les preocupa que esté a 3.500 km de distancia, y las caídas, pero aquí estoy", dice el chico.
Pablo, estudiante de primero de telecomunicaciones, obtuvo un premio de robótica con un grupo del instituto y sueña con poder tener una moto y poder arreglársela cuando sea preciso. El deporte será un hobby, nunca un objetivo profesional.
"El único objetivo en la Titan es terminar la carrera y levantar el fósil que regalan. Esta carrera tiene nivel, y cuando nos apuntamos sabíamos que nos metíamos en un fregado importante. Aquí hay que venir preparado física y mentalmente , y yo pienso que estoy preparado, para eso he entrenado desde agosto".
Alucinando con el montaje del campamento, Pablo tiene claro que "salimos a disfrutar, a pasarlo bien y a recaudar anécdotas con mi hermano para luego compartirlas con la familia y amigos. Vemos que esta prueba es para veteranos, no hay lugar para juveniles, pero me acogen bien....", añade.
Galán se permite darle un consejo a Antonio Rodríguez, el más veterano de la Titan Arabia Saudí, 52 años mayor que él. "Le diría que siga así, que le dure la pasión por el ciclismo y que siga muchos años. Espero ser Titan Legend en el futuro, pero para eso hay que venir muchas veces y sufrir mucho".
Rodríguez no para de sonreír, asume su condición de "abuelo" de la Titan, pero su ejemplo y su mensaje va dirigido a los mayores y los jóvenes.
"Me encuentro muy bien de cabeza, y la Titan me ayuda mucho a ello, porque si no hago deporte me jubilo del todo y se te puede caer el mundo encima. Con el deporte estoy todo el día ocupado, por la mañana entreno, por la tarde camino y todo el día lo paso haciendo algo. Después de jubilado, he continuado como si estuviera trabajando, me levanto a la misma hora de siempre, entreno todos los días, el deporte me da vida", explica Rodríguez.
Antonio se dirige a Pablo para decirle "que disfrute del deporte y de la bicicleta, que no se obsesione ni con tiempos ni con nada , que venga a disfrutar, que se olvide e llegar entre los primeros...".
También manda su filosofía de vida para sus contemporáneos, sobre todo para aquellos que se dejan la actividad una vez jubilados.
"Recomiendo a todos los mayores que hagan deporte. Tengo amigos de mi edad que parecen viejos, yo también lo soy, pero me mantengo bien, con ilusión y ganas de hacer cosas. Y pienso seguir así".