Porsche Cayman, un deportivo directo al estrellato
Después de los nuevos 911 y Boxster, por fin le ha llegado el turno de la renovación al Cayman. El tercer biplaza de Porsche ha hecho su debut en el Salón de Los Ángeles para redondear una gama deportiva realmente espectacular en el catálogo del fabricante alemán.
En el Cayman se repiten las características que ya vimos en el nuevo Boxster: mayor anchura de vías y distancia entre ejes, voladizos más cortos, ruedas más grandes, motores con un extra de potencia… Todo encaminado a una mayor efectividad en la conducción, la base de todo Porsche.
Pero también tiene algo más. Nuevos equipamientos de confort (acceso y arranque sin llave, control de crucero activo…) y motores más eficientes, con consumos por debajo de los 9 litros en todos los casos pese a que la potencia media de la gama oscila por los 300 caballos.
Estéticamente supone una evolución del modelo anterior, no un cambio radical, ni mucho menos. En el frontal en el que sobresalen las enormes tomas de aire para refrigerar los frenos y los nuevos faros; en su vista lateral se mantienen las características branquias que alimentan de oxígeno al propulsor situado en posición central trasera y en la zaga ahora hay un nuevo alerón retráctil con mayor incidencia incluso que el del Boxster.
El interior toma la misma identidad que el del Boxster o el 911, con la consola central heredada del Panamera y el mismo gusto por la calidad de todos los últimos Porsche.
Más potentes, más efectivos
Los nuevos Cayman no defraudarán a quienes esperen más potencia. No mucha, pero ganan algún caballo que otro en la nueva generación. El 2.7 se va ahora a los 275 CV mientras que el 3.4 del Cayman S gana cinco caballos para alcanzar los 325. Con el menor peso de la nueva generación las prestaciones mejoran (el Cayman firma una punta de 266 km/h y un 0-100 en 5,4 s. mientras que el S se va a los 283km/h y 4,7 segundos en el sprint.
Con todo, el mayor progreso viene en las cifras de consumo, que se quedan en unos más que razonables 7,7 y 8,0 litros respectivamente. Las mejoras en los propulsores y la inclusión del sistema de parada y arranque son los causantes de este ahorro.
Pese a que aún quedan unos cuantos meses para que los veamos rodar por nuestras carreteras (su comercialización se iniciará el 2 de marzo de 2013), ya conocemos los precios de la gama en España: el Cayman costará 57.461 euros (incluso menos que el modelo actual) y el Cayman S saldrá por 74.388 € con el cambio manual y 74.753 con el automático de doble embrague PDK (apenas hay diferencia porque el PDK se beneficia de un tramo impositivo más ventajoso por sus menores emisiones).