Mercedes decidió hace ya muchos años entrar a competir en el mercado de los compactos con el Clase A. Y ha sido todo un éxito. Tanto es así que marcas como BMW, Audi y Volkswagen se han tenido que esforzar mucho para poner a su altura a su Serie 1, A3 y Golf respectivamente.
Ahora llega la cuarta versión del Clase A. Y claro, muchos se preguntan: “¿Merece la pena?” La respuesta es muy clara: sí. Y mucho. Y es que este nuevo Mercedes llega con una serie de secretos que no te van a dejar indiferente.
El nuevo Clase A
Y es que ya si tenemos en cuenta que el vehículo que abre la gama se esta nueva serie es una que incorpora un motor turbodiésel, podemos empezar a sospechar que va por buen camino. Se trata del Clase A 80 d 7G-DCT, que otorga ni más ni menos que 116 caballos de potencia.
En cuanto a la estética, no supone una gran revolución respecto a su antecesor, pero sí una evolución que llega con unas líneas más finas y afiladas. Con un capó más bajo y alargado, el compacto de cinco puertas llega con un punto aún más deportivo.
Un interior maravilloso
Eso sí, la belleza, como en todo, está en el interior. Y es que al margen de sus más que cómodos asientos, es el salpicadero lo que más llama la atención. No es para menos. Como podemos ver en las imágenes, es impactante.
En la versión Premium, este nuevo Clase A llega con dos grandes pantallas de más de 10 pulgadas cada una que ofrecen una resolución más que destacable. Además, cuenta con un sistema de inteligencia artificial, que en Mercedes han denominado Mercedes-Benz User Experience, que responde por control de voz.
¿Qué ofrece este sistema? De todo. Le puedes pedir que regule la temperatura, que cambie las luces interiores, que te lleva a algún sitio (que te lo muestre en el navegador) o que te ofrezca información de la temperatura exterior.
Y todo ello por un precio que, en su versión más barata, parte desde los 32.700 euros. Teniendo en cuenta que es un Mercedes, que llega con los mejores asistentes en conducción y con un motor que no es precisamente una broma, es un precio más que razonable.