El Gran Premio de China, que el próximo fin de semana hace el número mil en Fórmula uno, utilizará los compuestos duro, medio y blando de neumáticos, que ocupan el espectro medio de la gama, según informa la marca Pirelli.
"Todos ellos encajan a la perfección con las cambiantes exigencias del circuito de Shanghai, conocido por albergar carreras en las que la estrategia de neumáticos ha sido esencial", explica el proveedor oficial de neumáticos para el Mundial de Fórmula Uno.
La pista es famosa por sus largas rectas y peculiares curvas. Los prolongados tramos rectilíneos refrigeran en exceso las gomas delanteras, elevando el riesgo de bloqueo en la siguiente frenada, según explica.
En el Gran Premio de China del año pasado se vieron numerosas estrategias: Daniel Ricciardo (Red Bull) ganó con una opción a dos paradas, a pesar de que la carrera se vio afectada por el coche de seguridad.
El asfalto de la pista, señala Pirelli, tiene un índice de abrasión medio y resulta bastante exigente con las gomas, en particular con la delantera izquierda. Las fuerzas laterales (en las curvas) quedan equilibradas con las longitudinales (aceleración y frenada). Las curvas 1 y 13 son las más exigentes.