El español Marc Márquez (Repsol Honda RC 213 V), vencedor este domingo del Gran Premio de San Marino de MotoGP, afirmó que "ganar en la última vuelta es un chute de adrenalina".
"Es mucho más, pero quería ganar y tuve que cambiar la estrategia, ya que tener esa ventaja de puntos después de Silverstone en el campeonato te lo permite. Por eso tuve que hacerlo de otra manera", explicó el vencedor en Misano Adriático.
Del francés Fabio Quartararo, segundo este domingo, destacó que e "está preparado para ganar carreras y para liderar, como se ha visto hoy con un tío que te está apretando a medio segundo toda la carrera y sin cometer un error. Eso significa que tiene talento y tiene velocidad".
"Lo ha demostrado en entrenamientos y hoy en carrera se ha visto que también está listo para ganar, así que de aquí a final de año, intentaré que no, puede ganar alguna carrera, y el año que viene será uno de los rivales muy a tener en cuenta para el campeonato", sentenció el piloto de Repsol Honda.
Al recordar el incidente del sábado con Valentino Rossi, Marc Márquez fue claro al afirmar que tiene asumido que "la batalla en los micrófonos" la tiene "perdida". "Pero a mí la batalla que me interesa más es en carrera y es ahí donde doy mi cien por cien. Por eso ayer no entré en polémicas, porque mi batalla es otra y está en el campeonato", añadió.
Sobre la carrera de este domingo, señaló: "Ni él (Quartararo) ni yo lo teníamos claro. Yo no tenía claro que si me ponía delante podía ir un poco más rápido ya que cuando vas detrás de una Yamaha pilotan diferente y es difícil, pero cuando es al revés, también se les hace muy difícil a ellos".
"Yo creo que ni él ni yo teníamos claro si yo delante podía ir más rápido o no, y por eso él también ha decidido seguir tirando ya que había esta duda", recalcó.
Márque, una vez más, restó relevancia a los abucheos que le dedicaron los aficionados italianos: "Es dar titulares donde no toca y dar voz a gente que no merece la pena. Yo creo que hoy se ha visto un buen espectáculo de motociclismo y los que vienen a los circuitos lo hacen para disfrutar con adelantamientos, carreras y situaciones como las vividas en la última curva".
El líder del equipo Repsol Honda no quiere oír hablar de sus opciones matemáticas al título. Lo aprendió en 2014, cuando tuvo prisa por ser campeón y falló en Misano y en Aragón.
"Es verdad que lo intentaré, pero en Aragón llegaré el jueves a la conferencia de prensa y diré y pensaré en 'a ver si podemos ganar la carrera el domingo', pero lo importante es no tener prisa y mantener la regularidad que tenemos ahora para acabar en el podio en todas las carreras", comentó.