Renault es una de las marcas con mayor presencia en nuestro país. De hecho, ser la marca madre que ‘cuida’ de Dacia le ha reportado grandes beneficios. Sobre todo gracias al Dacia Duster, el SUV low cost por excelencia en nuestras carreteras. En Renault, el SUV destinado a ser el top ventas es el Kadjar.
Hablamos de un SUV de tamaño medio que, como bien saben en la marca gala, no es que tenga un panorama precisamente fácil por delante. Y es que lucha en una de las batallas más duras del momento: la del mercado de los SUV de tamaño medio.
Un mercado que se ha hecho grande en los últimos años. Muchos de los conductores que antes optaban por una berlina o un monovolumen de tamaño medio lo hacen ahora por un SUV, de ahí que modelos como el Nissan Qashqai o el Seat Ateca sean de los más vendidos.
Pero más allá de la fuerte competencia que pueda tener este Renault Kadjar, el SUV galo tiene otro problema. Y ahí no entra la competencia, sino que es un problema propio y que deberías saber si tu idea es hacerte con uno de ellos: el doble embrague.
Parece ser que este embrague no es precisamente el más fino ni el más suave del momento. Todo lo contrario. No son pocos los que ya avisan que este sistema tiende a hacer de la salida en parada una salida muy brusca.
Puede parecer un problema menor, pero teniendo en cuenta que este tipo de vehículo está destinado a familias de entornos urbanos, es algo muy a tener en cuenta. Eso sí, si bien parece ser un problema común, los que ya tienen uno aseguran que, al margen de este pequeño ‘pero’, el Kadjar es un SUV que se comporta perfectamente en todas las situaciones y una excelente opción de compra.
De hecho, por equipamiento, eficiencia y comodidad, no tiene nada que envidiar a sus rivales directos.