Si tu idea es hacerte con un BMW Serie 1, lo primero que debes tener en cuenta es que es una muy buena idea. Y es que el modelo germano es de eso que, al margen de entrar por los ojos, cumple perfectamente con lo exigido en un coche de estas características.
Al fin y al cabo, por mucho que sea de los BMW más sencillos, no deja der ser un modelo premium. Un modelo que llega, eso sí, con ciertos cambios respecto a generaciones anteriores. Cambios para bien.
Entre otras cosas porque la marca germana parece haber querido dotar a este nuevo Serie 1 de unas características que hacen de él un modelo más dócil, más cómodo y más eficiente.
Seguramente, teniendo en cuenta que es un modelo destinado a jóvenes o a parejas, los alemanes han optado por hacer de él un coche más completo. Es por eso que, si bien es cierto que se ha perdido algo de chispa en cuanto a motor, se ha ganado espacio interior y comodidad.
Ojo, no es que este Serie 1 no tenga brío. Todo lo contrario. Ya el motor que llega en la versión que da acceso a la gama nos encontramos con una mecánica de 140 caballos con un cambio automático.
La idea de BMW, y que han llevado a cabo a la perfección, es la de un modelo más equilibrado, pensado para viajar tanto sólo como en compañía, con la última tecnología desarrollado por los de Múnich y con el estilo inconfundible de BMW.
Además, como suele ser habitual en la marca de Baviera, las posibilidades de personalización así cómo de equipamiento son casi infinitas si estamos dispuestos a rascarnos el bolsillo. Un Serie 1 más equilibrado, mejor equipado, con más tecnología y mayor espacio interior que, seguro, va a seguir sumando adeptos. Y con razón.