No queda demasiado para que el nuevo Seat León aterrice en los concesionarios. La cuarta generación del compacto fue presentada a finales de enero y antes de verano deberían estar listas las primeras unidades salidas de la cadena de producción.
Sin embargo, el popular compacto español ha visto cómo un personaje ha entrado en acción y ha modificado los planes de la firma en cuando a su fabricación.
Hablamos del coronavirus, o conocido científicamente como COVID-19. Y no, no hablamos de que haya infectado a los trabajadores de la firma. Pero como decíamos, sí ha provocado modificaciones en la fábrica de Martorell.
Desde hace unos días hasta 150 trabajadores del fabricante español se han puesto manos a la obra en la fabricación de respiradores para los afectados por la maldita pandemia que tiene a un tercio de la población mundial confinado en su domicilio.
Todo empezó cuando la crisis iba saturando de forma progresiva el sistema sanitario público. En ese momento Seat decidió cambiar sus planes y fabricó hasta 13 prototipos de respiradores.
De ellos quedó finalmente uno, creado a partir del motor de un parabrisas, ejes de una caja de cambios y unos engranajes impresos por la firma.
Su nombre es OxyGEN y ha sido creado con la colaboración de Protofy.XYZ, y actualmente se encuentra en fase de pruebas. Un test de larga duración tras el que debería ser homologado, si los resultados son buenos.
Y atención, porque este nuevo respirador se ensambla en una de las líneas de montaje del nuevo Seat León. Concretamente, donde se fabricaba un subchasis. Esperamos que este nuevo invento de Seat esté listo muy pronto y los primeros respiradores puedan llegar cuanto antes a los hospitales.
De esta forma, Seat se suma a los esfuerzos de España para luchar contra el coronavirus. Bravo.