Si estás leyendo estas líneas, muy probablemente te hayas interesado en algún momento por el Mercedes GLA. Si es así, estás en el sitio adecuado. Y es que hay algunos detalles que debes conocer del SUV alemán antes de dar el primer paso hacia el concesionario.
Porque es posible que el GLA sea de tu interés a raíz de como era su primera generación. Y debes saber que en su nuevo ciclo ha cambiado considerablemente. Ahora es un concepto diferente.
La generación actual es un todocamino con todas las letras, mientras que el anterior era un compacto crossover. Esto le otorga una polivalencia mayor respecto a su antecesor.
De entrada, ofrece mucho más espacio en su interior. La batalla ha crecido en 30 mm hasta los 2.729 mm. En la parte posterior también ha aumentado en 116 mm el espacio para las piernas de los ocupantes. En altura ha crecido en 104 mm, mientras que en su maletero dispone de 14 litros más que el anterior para ofrecer 430 litros de carga. Asimismo, en longitud total también ha crecido en 14 mm, llegando ahora hasta los 4,41 metros.
Por otro lado, es interesante conocer el mapa de versiones disponibles antes de tomar una decisión. En el apartado mecánico, empezamos con los gasolina. La gama se compone por los GLA 200 con 163 CV, GLA 250 con 224 CV, AMG A35 con 306 CV y AMG A45 con 421 CV.
En diésel, el catálogo se compone con los GLA 200d de 150 CV y 220d con 190 CV.
Por último, debes tener en cuenta la versión híbrida enchufable, el Mercedes GLA 250e con 218 CV.
Todos ellos montan un sistema de transmisión automática de doble embrague y 8 relaciones y pueden contar con un sistema de tracción total, menos el GLA 200, que lleva un cambio de 7 relaciones y no puede llevar tracción total.
Dicho esto, cabe culminar con los precios más económicos. Por 40.800 euros sin descuentos podemos tener un modelo de acceso a la gama gasolina, el GLA 200. La versión de entrada a los diésel, el Mercedes GLA 200d, cuesta 41.125 euros.