El nuevo Volkswagen Golf GTI es un coche brutal, con un pero. Y es éste

La gama de la octava generación del Volkswagen Golf sigue enriqueciéndose y una de las versiones más esperadas acaba de salir del horno. Nos referimos al Volkswagen Golf GTI. La versión más deportiva de la gama.

Un coche con el que están encantadísimos todos los que lo han probado, pero en el que subrayan un pequeño problema a tener en cuenta. Sobre todo para aquellos que tengan los 35.000 euros que costará aproximadamente.

Así se presenta el nuevo Golf GTI

Vayamos por partes. El Volkswagen Golf GTI ha sido fabricado sobre la plataforma MQB. Es decir, no es un modelo nuevo, sino una evolución del anterior. Luce en su exterior una estética agresiva, con un chasis deportivo, grandes llantas y una doble salida de escape.

Bajo el capó monta un propulsor de 2.0 litros que desarrolla 245 CV de potencia muy bien aprovechados. Su funcionamiento es excelente, así como su relación con el cambio automático DGS. Los que pensaban que perdería deportividad con una transmisión automática estaban muy equivocados. Y monta tracción delantera.

Este bloque permite al Golf GTI alcanzar una velocidad máxima de 250 km/h. Pero también responde perfectamente en las carreteras con curvas. Su ratio de suspensión ha sido aumentado en un 5% en la parte delantera y en un 15% en la trasera, lo que lo mantiene pegado al suelo como su fuera por raíles. Además, cuenta con un bloqueo electrónico del diferencial del eje delantero que ya montan el Performance y el TCR, lo que mejora la tracción y su dinámica.

Asimismo, VW estrena una tecnología que controla el bloqueo electrónico del diferencial y el control del amortiguador, reajustándolo hasta 200 veces por segundo.

Por otro lado, como era de esperar, en su interior viene de lo más equipado. No falta la tapicería de cuadros escoceses, el cockpit digital personalizable y la pantalla táctil central, desde donde manejaremos buena parte del equipamiento disponible, así como el sistema de info entretenimiento.

Un pequeño problema

Pero aquí llega el problema. Y es que el sistema multimedia es algo complejo. Necesitamos muchos pasos para pasar de una opción a otra y la configuración no es fácil. Algo que, como decíamos, puede ser un problema para buena parte de los compradores del GTI, que teniendo en cuenta su elevado precio no serán los conductores más jóvenes los que se hagan con uno precisamente.

En cuanto al resto, estamos ante un modelo redondo que se mantiene a la altura de sus predecesores, e incluso los supera.