El sector de la automoción está virando hacia un escenario en el que la movilidad sostenible es la protagonista y las emisiones, el gran enemigo. Es por eso que muchas marcas están empezando a renunciar al diésel para dejar gamas compuestas por motores de gasolina, que en su mayoría están asociados a sistemas electrificados.
Pero eso no es todo. La tendencia del mercado está dejando de lado los monovolúmenes. Son los SUV los que se ha hecho con casi todo el protagonismo. Y todo ello ha desembocado en decisiones como la que acaba de tomar Ford.
La firma norteamericana ha decidido reducir la gama del Ford Galaxy a un solo modelo de gasolina con mecánica híbrida (HEV). Las versiones diésel con bloques 2.0 TDCi de 150 CV o 190 CV desaparecen. Además, el monovolumen de siete plazas solo estará disponible en una variante. Además, también ha dejado solo un acabado.
Así, el Ford Galaxy estará disponible por un motor de gasolina 2.5 Duratec asistido por un motor eléctrico. Este se alimenta de una batería de iones de litio de 1,1 kWh con la que puede recorrer una pequeña distancia en modo 100% eléctrico. En total, este bloque entrega 190 CV de potencia y 200 Nm de par máximo. Y está gestionado por un cambio de marchas automático CVT y un sistema de tracción delantera.
Gracias a ello consigue una velocidad máxima de 185 km/h y hacer el 0 a 100 km/h en 10 segundos. Y registra un consumo medio de 6,5 litros cada 100 kilómetros. Además, cuenta con la etiqueta ECO de la DGT.
En equipamiento, el nuevo Ford Galaxy estará disponible con el acabado Titanium. Este incluye elementos como:
Dicho esto, solo nos queda conocer el precio. El nuevo Ford Galaxy empieza e los 47.338 euros sin ayudas ni promociones.