Es Noticia

El problema desconocido por muchos que preocupa a Mercedes

Mercedes
Mercedes
DMQ
Foto autor
R. Rodríguez

Los fabricantes de automóviles se enfrentan a diario a nuevos retos para evitar que las ventas sigan cayendo y mantener el margen de beneficios. Entre ellos destaca el problema del abastecimiento, que impide a las marcas entregar sus modelos en los plazos previstos.

Pero hay otros problemas de los que no se suele hablar tanto. Por ejemplo, el que sufre Mercedes. Un problema que tiene que ver, atención, con la piratería. Sí, vender productos falsos no es solo problema del sector textil, de la música o del cine. El segmento del motor también vive este problema. Y Mercedes es una de las firmas que más la sufre.

Mercedes GLS

Mercedes lucha a diario contra la piratería de componentes

Son muchos quienes venden componentes de Mercedes bajo la firma de la estrella pero que en realidad son falsificaciones de recambios y accesorios originales. Esto supone un gran problema, ya no solo para la marca, sino también para los usuarios, que se enfrentan a problemas de seguridad muy serios y que pueden costar vidas.

No sería la primera vez que a un conductor se le levanta el capó en plena autovía y le revienta el parabrisas. Esto le ocurrió a un usuario, según han contado Lita Silje Janisch, responsable del departamento de Mercedes que estudia este tipo de fraude. Comentó que el propietario reclamó los daños, pero después de una investigación comprobaron que la parrilla había sido sustituida por una de Mercedes que no era original, lo que llevó a que el cierre del capó no encajara como es correcto. “Si las falsificaciones llegan a manos de los clientes, puede ser realmente peligroso, especialmente con piezas relevantes para la seguridad”, advirtió Janisch.

Mercedes EQB

Un problema contra el que Mercedes lucha cada día. Desde Mercedes Group estudian patentes y entidades de propiedad intelectual para evitar este tipo de fraude. Y lo cierto es que consiguen buenos resultados. En 2021, por ejemplo, lograron intervenir más de 1,7 millones de componentes falsos. Una cifra que supuso un 6% más que el año anterior.