El mundo de la automoción está en constante evolución y esto se traduce en la desaparición de motores que han dejado su huella en la historia de las marcas. Es el caso del VR6, el motor de seis cilindros en V más famoso de Volkswagen, que está a punto de desaparecer en el último portador que lo aloja, el Volkswagen Atlas.
Este motor, que destaca por su peculiar configuración, ha sido utilizado en diferentes modelos del Grupo Volkswagen y se ha ganado el cariño y admiración de muchos fanáticos de la marca. Sin embargo, la firma ha decidido que es hora de dejar atrás este motor de gran personalidad y adaptarse a los nuevos tiempos.
Hein Schafer, Director de marketing de producto de Volkswagen, ha explicado que la tecnología del VR6 es antigua y no cumple con los objetivos de emisiones, por lo que no merece la pena invertir en él para seguir utilizándolo en nuevos modelos. Es por eso que el Atlas será el último portador del VR6 original.
Aunque no era el motor más potente ni el más eficiente, el VR6 tenía algo especial que lo hacía único y querido por los fans de la marca. Su denominación "R" hace referencia a la palabra en alemán "reihenmotor", que significa motor en línea, y se debe a que los ingenieros de Volkswagen tuvieron que adaptar el motor a un vano pensado para un cuatro cilindros en línea.
Este motor ha sido utilizado en diferentes modelos del Grupo Volkswagen, pero una de sus iteraciones más interesantes fue en los Golf R32 de cuarta y quinta generación, que desarrollaban 240 y 250 CV respectivamente.
En el caso del Atlas, la cilindrada del motor subió hasta los 3.6 litros, y la potencia fue elevada hasta los 280 CV y 360 Nm de par. Aunque el SUV ofrece prestaciones correctas, no busca ser un coche deportivo y el sonido del VR6 queda limitado.
De momento, el VR6 sigue presente en el configurador del Atlas, pero pronto será reemplazado por un motor de cuatro cilindros de 2.0 litros con mejores consumos y menos emisiones. El SUV alemán también contará con versiones PHEV en el futuro.