El Renault Mégane dice adiós y tiene ya hasta sustituto, que se lanzará en 2024 y será un crossover. La cuarta generación del coche se dejará de fabricar este año.
El nuevo modelo no tiene nombre asignado pero combinará lo mejor del Mégane compacto y de el Renault Captur, un SUV pequeño que está dando muchas alegrías a la marca francesa. Rondará, según todo indica los 4,35 metros del Mégane actual y heredará la altura libre desde el suelo del Captur, ya que se elige el formato crossover. Se construirá sobre la plataforma CMF-B, la que se usa para el Captur, y no sobre la CMF C/D.
Con ello, Renault espere ahorrar el dinero suficiente para competir con garantías en un mercado cada vez más difícil. Renault, conviene recordarlo, mantiene una alianza global con Nissan y Mitsubishi. No está claro todavía dónde se fabricará el modelo que sustituirá al Mégane actual, que se fabrica en España.
Los laterales del coche que Renault ha diseñado se inspiran en la línea del Austral y en el interior una gran pantalla digital en forma de L permitirá controlarlo todo. El habitáculo dará cobijo sin problemas a cinco adultos y el maletero también será generoso.
Será completa (gasolina, GLP e híbrido E-Tech) pero no vamos a encontrar versión PHEV. La demanda eléctrica se cubrirá con el Mégane E-Tech Eléctrico, al que le queda cuerda aún para años y que se fabrica actualmente en Francia y tiene, en cuanto a línea y prestaciones, muy poco que ver con el Mégane actual. Durante el verano de 2024, el coche que debe relevarlo llegará a los concesionarios.