Hay algo que, ya de entrada, hay que reconocerle al Yaris Cross: está muy bien dimensionado y no recuerda para nada a esos pequeños utilitarios convertidos en SUV para satisfacer modas y con las ideas de algún diseñador incapaz. Además, este mes el Toyota Yaris Cross llega con una interesante oferta.
A diferencia de, por ejemplo, lo que le sucede al Seat Arona, el Toyota Yaris Cross no parece un simple utilitario con la suspensión elevada. De hecho, el pequeño todocamino nipón vendría casi a ser algo parecido a lo que sería un RAV4 en el caso de que alguna extraña norma no le permitiera alcanzar sus dimensiones. El coche mide 4,18 metros, alcanza el 1,59 de alto y ofrece un solvente maletero de 390 litros. Se echa de menos, eso sí, algo más de amplitud interior. La calidad percibida en el habitáculo también es mejorable.
Sólo hay una opción para mover el Yaris Cross si decides llevártelo a casa: debes conformarte con un HEV 1.5 de gasolina con 116 CV que consume 4 litros cada 100 km. Los acabados son cuatro: Business Plus, Active Tech, Style y Adventure. La versión de acceso es la Business Plus y está disponible este mes, según el portal de ofertas quecochemecompro.com, a partir de 24.250 euros. Es gracias al desceunto de 2.350 euros que aplica la marca.
En junio, el Yaris Cross ha funcionado muy bien: con 2.024 unidades vendidas, el coche se posiciona en el quinto puesto del Top 10. Por encima, queda el MG ZS, el todocamino de la marca británica propiedad de SAIC Motors que parece decidida a revolucionar Europa con este coche y, también, con el eléctrico MG4. En el Top 3 dos utilitarios y un B-SUV: el Dacia Sandero, el Fiat 500 y, efectivamente y como era de esperar, el Arona del que antes hablábamos. ¿Por qué vende más que el equilibrado Yaris Cross? Sólo lo explica el precio: el Toyota cuesta 5.000 euros más y, en eso, la marca japonesas se equivoca. Un B-SUV no puede costar casi 25.000 euros.