Cuando hablamos de Tesla, nos vienen a la cabeza sustantivos como calidad, futuro, tecnología o autonomía eléctrica. Sin embargo, buena parte de su buena imagen podría estar sustentada sobre una mentira. Eso es lo que se desprende de un informe publicado por Reuters.
Tesla es una de las marcas punteras en el sector de la movilidad eléctrica. Ha sido una de las primeras en apostar únicamente por coches eléctricos y actualmente está entre las marcas más vendidas en todo el mundo. Ahora, no obstante, buena parte de su prestigio cae por los suelos tras unas informaciones que sacó a la luz la agencia Reuters.
Según el informe, la empresa de Elon Musk empezó a recibir miles de llamadas quejándose de que sus modelos no eran lo que se les había prometido a los clientes en cuestiones de autonomía. Al parecer, los vendedores citaban cifras muy altas de autonomía eléctrica para los vehículos que no llegaban a cumplirse. Lo anunciado se veía reducido rápidamente cuando existían obstáculos como las bajas temperaturas, carga excesiva de personas u objetos, o simplemente el viento en contra.
Muchos clientes notaron el asunto rápidamente. Al parecer, el sistema de los Tesla mostraba una autonomía muy favorable cuando el coche estaba cargado al 100%. Según el informe, el algoritmo estaba diseñado para mostrar las cifras más optimistas. Y estas se iban estabilizando a medida que la carga se iba gastando, acercándose más a la realidad y alejándose de lo anunciado inicialmente. “Elon quería mostrar buenas cifras de autonomía con la batería completamente cargada. Cuando compras un coche del lote viendo una autonomía de 350 millas (563 km), 400 millas (644 km), te hace sentir bien”, recogen en Reuters.
Tal fue el aluvión de llamadas que Tesla creó un departamento específico para recibir las quejas. Pero éste, lejos de responder satisfactoriamente, mareaba a sus clientes hasta que estos desistían. Por ejemplo, les tomaba el pelo mandando un mensaje de texto pidiendo hacer cosas sencillas y en la pantalla aparecía un mensaje al estilo de “Chequeo remoto”, pero en realidad no ocurría nada.
Se comenta que esta sección llegó a recibir 2.000 llamadas por semana y que se llegaban a evitar hasta 750 revisiones en el taller. Cada caso evitado suponía un ahorro de unos 900 euros para la empresa. La sede de esta sección se encontraba en Las Vegas.
Cabe decir que a principios de este año Tesla ya fue multada en Corea del Sur tras descubrir que los coches sólo llegaban a la mitad de su autonomía anunciada a bajas temperaturas. Además, un estudio de Recurrent señala que la autonomía media de tres modelos de Tesla es un 26% inferior a la anunciada.