No es que sea precisamente ningún secreto que la industria de automóvil se encuentra en uno de sus momentos más importantes y, sobre todo, más inciertos de los últimos años.
Y es que la transición de los motores de combustión tradicional, es decir, de los gasolina y diésel clásicos, a los motores 100 × 100 eléctricos ha provocado que los últimos años hayan aparecido y sigan apareciendo diferentes soluciones mecánicas para abordar este proceso de transición.
Lo que es más que evidente es que tarde o temprano todas las marcas van a acabar apostando por los motores eléctricos, de ahí que sean muchos los fabricantes que están intensificando sus pruebas y el desarrollo de algunos de sus modelos de estas características en los últimos tiempos.
Pero más allá de las marcas propias, especialistas como ZF Friedrichshafen, uno de los proveedores más famosos y mejor valorados de la industria, ya están demostrando que se puede crear un motor eléctrico muy potente y de un tamaño muy pequeño, algo perfecto para acabar reduciendo el peso de estos modelos, a su vez, su precio.
Y es que ha sido este fabricante el que ha presentado una de sus grandes novedades, un motor eléctrico llamado EVSys800. Se trata de una mecánica de un tamaño parecido al de dos cajas de zapatos apiladas en el que están presentes el motor eléctrico, la electrónica, el inversor, y la reductora, es decir, lo que sería una caja de cambios en un motor de gasolina.
Uno de los aspectos más importantes de este motor es que, con tan solo 74 kilogramos, entrega una potencia máxima en pico de 374 CV y continua de 280 CV, así como un par continuo de 2.850 Nm y máximo de 5.200 Nm. Un motor que puede presumir de ser hasta un 30 % más ligero respecto a los actuales, que hay que sean muchos los que aseguren que puede que sea la base de muchas mecánicas del futuro.