Saltarse un semáforo en rojo es una práctica cada vez más penalizable. Si bien en alguna ocasión puedes despistarte y no ver qué está pasando, el hecho de saltarse un semáforo en rojo es una de las situaciones más comunes en el día a día. Una acción que está rotundamente prohibida y penada, entre otras cosas, por la seguridad de los peatones, ya que puede terminar en una tragedia mayúscula. Además, existe una gran posibilidad de que llegue una multa económica por la infracción cometida.
Tal y como dicta el Real Decreto 1428/2003, de 21 de noviembre, por el que se aprueba el Reglamento General de Circulación para la aplicación y desarrollo del texto articulado de la Ley sobre tráfico, mientras permanece encendida la luz roja, los vehículos “no deben rebasar el semáforo ni, si existe, la línea de detención anterior más próxima a aquél”. Una acción que, de no cumplirla, puede tener efectos negativos tanto para el bolsillo como para los puntos que cada persona tiene en su carnet de conducir.
En este tipo de situaciones pueden pasar dos cosas. La primera, que seas 'cazado' por una patrulla de la Policía o de la Guardia Civil. En ese caso, serán los agentes en cuestión quienes decidirán qué hacer: pararte o no y, una vez dialogado, poner o no una sanción económica. Otra opción es que la infracción la detecten cámaras de seguridad. En ese caso, la multa no llegará al momento, sino que se demorará y sabrás qué ha pasado una vez recibas una notificación a tu domicilio.
En estos casos, la multa económica por saltarse un semáforo en rojo asciende a los 200 euros, tal y como está estipulado por la Dirección General de Tráfico. Además de la sanción económica, se retirarán un total de cuatro puntos en el carnet de conducir.
Saltarse los semáforos 🚦, no respetar las señales⛔, usar la acera, carril bus, taxi, bici o moto cuando no corresponde, es una conducta insolidaria e insegura.
Si todos respetamos, todos ganamos. La #seguridadvial, una responsabilidad de todos 🚶🚲🛴🛵🚘🛻#RespetaYConvive 👏 pic.twitter.com/7aOYLbFvNe
— Dir. Gral. Tráfico (@DGTes) September 13, 2021
Pero dentro de la línea roja que tiene la regla, hay varios puntos a tener en cuenta y que no conllevan una multa. Un caso de fuerza mayor, por ejemplo. Ahí recae una excepción de la regla que evita una sanción por saltarse un semáforo en rojo. Si estás en un contexto donde aparece un vehículo prioritario que requiere que te apartes para poder pasar, la acción está justificada como un caso de fuerza mayor y no habrá sanción ninguna.
Ese vehículo de fuerza mayor puede ser una ambulancia, policías en servicio o un coche de bomberos. Aún así, este tipo de situaciones no son muy claras, ya que una cámara sí podría multarte al no conocer el contexto. En ese caso, solo queda recurrir la multa.