Citroën siempre se ha caracterizado por poner en el mercado en modelos con un diseño claramente diferenciado y del resto y por ser una de las marcas que más arriesgado en este sentido. Un riesgo que normalmente le ha dado muchas alegrías y que, como bien evidencia del éxito de modelos como el Citroën C4, ha sido aplaudido por muchos.
Eso sí, no siempre está puesta arriesgada de la marca francesa llega de la mano de buenas cifras de ventas. Un buen ejemplo de ello es el que para muchos puede presumir de ser el modelo más polémico de la marca, tanto por diseño como por carrocería.
No es otro que el Citroën C5 X, un modelo que forma parte del segmento D y que cuenta con una carrocería crossover que lo convierte en un rival por tamaño y por tipo de coche de opciones tan asentadas en nuestras carreteras como es el caso del Skoda Superb, el Volkswagen Passat o el Peugeot 508.
Tal y como podemos ver en las imágenes, su diseño es uno de sus grandes argumentos de venta, aunque para muchos es también a la vez uno de sus principales pecados.
En cualquier caso, la marca francesa ha decidido aplicar ahora unas cuantas de más de 6.000 euros a la versión que llega con un motor híbrido enchufable de 180 caballos de potencia que le permite tener más de 60 km de autonomía eléctrica, con un precio de 42.000 euros. Un precio que incluso puede ser más bajo si optamos por hacer uso de las ayudas del Estado que buscan incentivar la venta de modelos con etiqueta CERO de la DGT.
Así, si bien es cierto que es un modelo que no pasa precisamente desapercibido por diseño, este Citroën no deja de ser una de las opciones más interesantes para aquellas familias que busquen una opción polivalente, bien dotada a nivel mecánico, perfecta para viajar cómodamente y que además, pueda beneficiarse de todas las ventajas de la citada etiqueta.